Una llamada al 091 y la inmediata intervención de los agentes permitió sorprender al detenido cuando trataba de acceder a un vehículo estacionado en la vía pública.
De nuevo la colaboración ciudadana fue clave, ya que la intervención vino precedida de una llamada al teléfono de referencia para emergencias policiales del 091. Los policías lograron interceptar y detener a uno de los autores, continuándose con las investigaciones para tratar de identificar al segundo implicado.
El aumento de este tipo de delitos hizo necesario que hace años la Comisaría de Toledo creara un grupo de agentes especializados en la investigación y tratamiento de estas denuncias.
Después de "hackear" las cuentas de sus víctimas amenazaba a las menores de edad con difundir información personal si no le enviaban fotos de contenido erótico.
Utilizaban bolsos preparados para que las alarmas antihurto no se activaran y realizaban varios "viajes" a la furgoneta para dejar las prendas de las que se apoderaban, calculando siempre los importes que portaban para que fueran inferiores a 400 euros