Piedraescrita ofrece un verano de ocio a 350 toledanos

El Servicio de Juventud y Deportes de la Diputación de Toledo, que coordina la diputada Sagrario Gutiérrez Fernández, desarrolla con éxito, en la comarca de La Jara, los campamentos de verano para jóvenes de entre 8 y 13 años. El albergue de Piedraescrita acoge, desde finales del mes de junio, y hasta finales de este mes de agosto, a diferentes grupos de jóvenes que participan de actividades medioambientales, deportivas, recreativas y culturales.

Del mismo modo, y como principal novedad en este año 2013, se ha ofertado a los jóvenes toledanos un Campamento Multiaventura en el Albergue “Dehesa Boyal”, en Los Yébenes, enfocado a niños de segundo año de infantil y cadetes. Los participantes se han dividido en dos turnos diferentes durante el pasado mes de julio, con un total de 61 participantes.

La relación de los adolescentes con la naturaleza es una de las cuestiones más destacadas a tener en cuenta en las ofertas de la Diputación de Toledo.

Piedraescrita acoge a un total de 350 jóvenes, que se van relevando durante todo el verano, con dos primeros turnos de cinco días cada uno y 50 niños, a finales de junio, para benjamines. Desde el uno de julio y hasta el 20 de agosto acuden al Albergue “El Linchero”, en turnos de diez días y 50 niños por turno, los incluidos en alevines y primer año de infantil.

En definitiva, jóvenes con edades comprendidas entre los 8 y los 13 años, participan de las diferentes y variadas actividades de Piedraescrita, como salidas a la naturaleza, senderismo y el conocimiento del privilegiado enclave de uno de los rincones más bonitos de la geografía toledana, situado en la divisoria de las aguas de las Cuencas del Tajo y del Guadiana, entre los nacimientos de los ríos Gévalo y Pusa, la Sierra de Altamira y el Rincón de Anchuras, asegura un contacto permanente de los jóvenes toledanos con el entorno y el medio ambiente natural.

El equipo encargado de la supervisión y cuidado de los participantes está formado por un director, cuatro monitores y un socorrista acuático, pendientes en todo momento del bienestar de los niños y niñas, además de coordinar y supervisar las actividades y acciones que se desarrollan en el entorno del campamento, entre las que destacan la recuperación de juegos y deportes populares y la puesta en marcha de talleres para aprender a hacer carpetas con material reciclado, colgapuertas, llaveros de nudos, atrapasueños, y otras muchas cosas, como juegos de cooperación, veladas o fuegos de campamento, destacando el de la última noche de cada turno, en el que se invierten los papeles y los niños hacen las veces de monitores, encargándose de organizar todo lo relativo con la fiesta de despedida .