La Guardia Civil, en colaboración con EUROPOL, ha culminado con éxito la ‘Operación VARITA’, una investigación que ha permitido desarticular una organización internacional dedicada al tráfico de drogas y detener a 38 personas en diferentes fases.
La red criminal, con base en España y el norte de África, enviaba grandes cantidades de marihuana y hachís a través de empresas de paquetería a 11 países europeos.
Durante el operativo, que comenzó en febrero del año pasado, los agentes lograron constatar que se habían remitido más de 5,5 toneladas de droga al extranjero. Las sustancias estupefacientes eran cuidadosamente envasadas al vacío y camufladas en paquetes para burlar los controles.
Parte de estos envíos fueron detectados en países como Polonia, Alemania, Países Bajos, Bélgica, Eslovaquia, Italia, Grecia, Suecia y Francia, gracias a la coordinación con las autoridades policiales europeas.
La organización criminal operaba de forma altamente estructurada. En los niveles inferiores se encontraban los encargados de preparar y transportar los paquetes a empresas de mensajería, tomando severas medidas de seguridad para evitar ser identificados. Un segundo grupo se especializaba en ocultar la droga mediante envoltorios multicapa y métodos para eliminar el olor.
En los escalones superiores, se encontraban los "recaudadores internacionales", responsables de cobrar el dinero de las transacciones en el extranjero. Estos individuos realizaban viajes exprés a distintos países desde diversos aeropuertos españoles para dificultar el seguimiento policial. Transportaban el dinero —entre 10.000 y 15.000 euros por viaje— en efectivo y en equipaje de mano.
Uno de los cabecillas principales fue identificado en la provincia de Toledo. Llevaba un alto nivel de vida y utilizaba un Grow Shop como tapadera de su actividad delictiva, junto a su pareja sentimental.
PLANTACIONES, ARMAS Y DINERO INTERVENIDOS
La operación permitió intervenir 346 kilos de marihuana y hachís, desmantelar seis plantaciones “indoor” de alto rendimiento, y confiscar armas de fuego, armas simuladas y blancas, 32.688 euros en efectivo, un coche y relojes de alta gama, además de herramientas para el cultivo y dispositivos de comunicación.
Las plantaciones estaban ubicadas en localidades de la provincia de Toledo, como Illescas, Torrijos, Numancia de la Sagra, Carranque, Yuncos, Yuncler, Huecas o Yeles, así como en Madrid capital y alrededores. En total, se realizaron más de 14 registros domiciliarios e industriales a lo largo de tres fases entre octubre y febrero.
DELITOS IMPUTADOS
A los detenidos se les imputan los delitos de organización criminal, tráfico de drogas, blanqueo de capitales, defraudación de fluido eléctrico, cultivo y elaboración de sustancias estupefacientes, y usurpación de vivienda.
La investigación fue liderada por el EDOA de la Guardia Civil de Toledo, con el apoyo de unidades especiales como los G.R.S., USECIC, Servicio Cinológico y Seguridad Ciudadana, así como la Unidad Técnica de Policía Judicial de Madrid, lo que permitió una intensa cooperación internacional con cuerpos policiales de otros países.