En el sector de la tecnología, hay compañías que se centran en lo más nuevo y rompedor… y luego están las que encuentran un hueco muy concreto, casi olvidado, y lo convierten en una oportunidad de oro. Ese es el caso de SPC, una empresa alavesa que lleva años especializándose en algo que muchas veces se pasa por alto. hacer que la tecnología sea accesible y útil para las personas mayores.
Lo que empezó como un pequeño proyecto de venta de teléfonos fijos se ha convertido en toda una referencia en dispositivos pensados para quienes no se llevan del todo bien con las pantallas táctiles, los menús infinitos o las apps que nunca se usan. Su historia es mucho más interesante de lo que parece a primera vista.

De teléfonos fijos a móviles con teclas grandes
Todo comenzó allá por los años 80, justo cuando se liberalizó el mercado de las telecomunicaciones en España. SPC aprovechó ese momento para meterse en el negocio vendiendo teléfonos fijos, cuando aún eran un básico en todas las casas.
Pero el verdadero giro llegó cuando empezaron a fijarse en un grupo de usuarios que no estaba teniendo una buena experiencia con los móviles modernos, las personas mayores. ¿La solución? Lanzar dispositivos simples, con teclas grandes, pantallas fáciles de leer y sin complicaciones innecesarias.
Y entre los muchos dispositivos que compiten hoy en día en internet, desde gadgets de última generación hasta plataformas de ocio que cuentan con ruleta online, poker u otras opciones, lo cierto es que productos como los de SPC marcan la diferencia justamente por ofrecer lo que otros no; simplicidad y utilidad real para quienes más lo necesitan.
El apagón del 2G que cambió el juego
Con la llegada del 4G (y la despedida progresiva del 2G), muchas empresas tuvieron que ponerse las pilas para no quedarse atrás. Y SPC lo vio venir. En vez de esperar a que sus móviles se quedaran obsoletos, decidieron transformar su catálogo y adaptarlo a las nuevas redes.
Gracias al 4G, sus móviles pasaron de ser aparatos para hacer llamadas a convertirse en pequeños centros de comunicación. Y eso les dio pie a lanzar SPC Care, una plataforma pensada para facilitar la vida tanto de los usuarios mayores como de sus familias. Permite localizar al usuario, enviarle recordatorios o gestionar el teléfono a distancia, todo de forma sencilla.
Mucho más que móviles
SPC no se ha conformado solo con teléfonos. También han creado tabletas, auriculares y otros dispositivos adaptados, siempre con el mismo enfoque. Todo esto con la idea de que nadie se quede atrás en esta era digital, por mucho que la tecnología avance a toda velocidad.
Mientras otros buscan entretenerse con gadgets de última generación, hay quienes apuestan por opciones más tranquilas, como probar una estrategia ruleta para jugar en Betfair, desde un entorno digital cómodo, accesible y seguro. En ese contexto, contar con un dispositivo intuitivo y fácil de manejar puede ser lo que destaque en la experiencia del usuario. Algo que muchas grandes marcas no han sabido hacer, enfocadas solo en la última novedad del mercado.
Saber escuchar y adaptarse, la clave de su éxito
¿El secreto? Escuchar al usuario. SPC ha sabido leer entre líneas lo que realmente necesitan las personas mayores; comunicación sencilla, seguridad y tranquilidad para ellos y sus familias.
Esa forma de trabajar, paso a paso y con los pies en la tierra, les ha convertido en referentes en su sector. Y lo han hecho sin prometer imposibles, solo cumpliendo con lo básico.