Villar de Cañas (Cuenca) volverá a escenificar su Belén Viviente tras el éxito de la primera edición de 2023. La cita, que ya se ha convertido en un imprescindible de la Navidad en la localidad, se ha fijado para el sábado, 28 de diciembre, desde las 12 de la mañana hasta las 19 horas.
El Belén ampliará su contenido con casetas previas al recorrido para reponer fuerzas, y contará con la participación de buena parte de los vecinos del pueblo encarnando a los personajes. A mediodía, podrán degustarse unas migas manchegas y, por la tarde, un chocolate caliente para combatir el frío.
El año pasado, el callejón de su iglesia parroquial se convirtió por primera vez en un original Portal de Belén, presidido por la portada renacentista del templo cuidadosamente adornada de pino, que cobijaba a María y José protegiendo con mimo a su pequeña Marina (el Niño Jesús). Este año, la tarea le corresponderá a la pequeña Candela, de unos pocos meses.
A la representación no le faltan las ocas, patos, gallinas, cabritillos y hasta una borrica; todos ellos, cedidos por vecinos del pueblo y de los alrededores.
Todo ello, sumado a la representación del nacimiento de Jesús, en dos pases: a las 13:30 horas y a las 18:00. Además, a medio día, se celebrará una misa de campaña en torno al Portal.
Villar de Cañas espera con ilusión este momento, y ya se ha engalanado para este acontecimiento con las labores de ganchillo y manualidades que han realizado sus vecinos, presididas por el gran árbol de ganchillo de la Plaza del Arenal.