La exposición a ruidos fuertes, en muchos casos asociada a entornos de ocio, aunque también laborales, así como el uso continuado de auriculares a alto volumen, es una de las principales causas de la pérdida de audición en jóvenes y adultos.
Más de 1.000 millones de jóvenes adultos corren el riesgo de sufrir una pérdida de audición evitable y permanente debido a este tipo de prácticas de audición poco seguras, según la Organización Mundial de la Salud, “presentándose este problema en población cada vez más joven”, alerta el doctor Carlos Asensio Nieto, especialista en Otorrinolaringología del Hospital de Día Quirónsalud Talavera.
El especialista subraya la importancia de concienciar para la prevención de la hipoacusia, “una patología irreversible que puede llegar a presentar una importante repercusión en el ámbito tanto laboral como social de las personas que la padecen, afectando de forma considerable a su calidad de vida”.
¿Qué es la hipoacusia? La hipoacusia o pérdida de audición se define como la incapacidad de una persona de oír tan bien como una persona cuyo sentido del oído es normal, es decir, cuyo umbral de audición en ambos oídos es igual o mejor que 20 dB. “Puede ser leve, moderada, grave o profunda, y puede afectar a uno o ambos oídos, de lo que dependerá el tipo de tratamiento que deba seguir el paciente”, detalla el doctor Asensio.
Causas. “Existen muchos factores que pueden provocar pérdida de audición: la formación de tapones, la mucosidad que puede quedarse en el oído medio por un catarro, las otitis derivadas de procesos gripales, la meningitis, el sarampión, determinados fármacos, la presbiacusia o perdida asociada al envejecimiento y el ruido”, explica el especialista.
Hipoacusia infantil. Aunque la pérdida de audición más frecuente está asociada al envejecimiento, también hay una alta prevalencia de hipoacusia infantil, “en este caso, asociada a factores genéticos, infecciones intrauterinas, asfixia perinatal, otitis crónicas, meningitis u otras infecciones como principales causas”, continúa el doctor.
Se trata de una modalidad que requiere de especial atención ya que, sostiene Asensio, “la detección temprana constituye un elemento clave para el posterior desarrollo y calidad de vida del menor”.
Consejos para la prevención de la pérdida de audición
Para el doctor Asensio, resulta “imprescindible la protección sonora, especialmente en el caso de personas que por su oficio están expuestas a altos y continuados niveles de ruido, tanto de maquinaria, como del tráfico, trenes u otras causas”.
Otra de las pautas a seguir es, en opinión del especialista, “limitar el tiempo que permanecemos escuchando a través de auriculares y disminuir el volumen por debajo de los 65 dB que, aunque nos parezca a veces insuficiente para compensar el ruido ambiental, resulta una garantía para nuestra salud auditiva”.
Asimismo, culmina, “acudir a un especialista ante cualquier síntoma de que no oímos bien y no esperar a que la patología se agrave para consultar con el médico”.
Un servicio integral. Junto a la hipoacusia, otitis, trastornos del equilibrio, vértigos, acúfenos y trastornos del sueño constituyen los principales motivos de consulta en la especialidad de Otorrinolaringología.
El doctor Asensio, especialista en cirugía cérvico-facial y cirugía del ronquido, es el responsable del servicio en el Hospital de Día Quirónsalud Talavera, que dispone de los medios técnicos y humanos para presentar una atención integral y personalizada a cada paciente.