Las tormentas, el granizo y las lluvias intensas que están azotando varias regiones de España durante el fin de semana, entre ellas Castilla-La Mancha, han dejado un paisaje desolador en un pueblo de Toledo.
La localidad toledana de Cabezamesada, con una población cercana a los 400 habitantes, se vio sorprendida este sábado, sobre las 19:30 horas, por una tromba de agua y granizo que anegó las calles del municipio en tan solo diez minutos.
Las consecuencias de la Depresión Aislada en Niveles Altos (DANA) son visibles en prácticamente todo el pueblo: árboles caídos, contenedores arrastrados por el agua, carreteras dañadas, vehículos atrapados, calles y campos anegados…
"Estamos haciendo recuento de los daños que hay: carreteras dañadas que han estado cortadas unas horas por el barro. Es lo que nos pasó en diez minutos de tormenta", ha explicado la alcaldesa de Cabezamesada, María Ángeles Herrero, a Noticias CMM.
“Estoy desconsolada”, ha afirmado la alcaldesa, que señala que la situación del campo también es “complicada”. Los almendros han quedado encharcados y los viñedos, embarrados. “Es una pena", lamenta María Ángeles Herrero.
Debido a la situación meteorológica y los daños acontecidos, el Ayuntamiento se ha visto obligado a suspender las actividades previstas para este domingo y a cerrar la piscina municipal, "por la seguridad de todos".
Según la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), la DANA que está atravesando el país no terminará el lunes, ya que a inicios de la próxima llegará otra vaguada.