Las dos caras del alcalde de Talavera y su ‘proyecto estrella’: ¿Se le hunde La Nao antes de zarpar?

El alcalde de Talavera de la Reina, José Julián Gregorio, recula y se desentiende de ‘su proyecto estrella’. Dos días, ese es el tiempo que ha durado la defensa que desde el equipo de gobierno talaverano se ha hecho del ‘Proyecto TT La Nao’. Concretamente, el tiempo transcurrido desde el anuncio del proyecto que “generará miles de puestos de trabajo” hasta el burofax enviado por la arquitecta Pilar Amores acusando a los promotores de la plataforma logística de usar planos del PSI de la Junta y que han sido “manipulados y alterados” sin su consentimiento.

La noticia publicada ayer por La Voz del Tajo respecto a un vídeo y un pdf sobre el proyecto de la plataforma logística intermodal ha destapado un posible plagio en los planos y ha obligado al alcalde a responder y posicionarse sobre el mismo, aunque la nota de prensa lanzada por el alcalde sigue dejando preguntas sin respuesta y genera otras cuestiones.

DE PROYECTO ESTRELLA A DESENTENDERSE. El lunes José Julián Gregorio calificó de “gran noticia para la ciudad” que Talavera pueda acoger en un futuro una plataforma logística. El primer edil realizó estas declaraciones tras la reunión que había mantenido en el Ayuntamiento con los responsables del proyecto. Para ello, enviaron una nota de prensa a los medios y una fotografía tomada en el antiguo salón de plenos donde, asimismo, se puede ver al primer teniente de alcalde, David Moreno, que también estuvo en la reunión.

Pero la defensa del proyecto por parte del dirigente popular va más allá y un día más tarde, el martes, volvía a defender que la ‘TT La Nao’, podría generar más de 7.000 puestos de trabajos directos y 12.000 indirectos y que “va a ser una revolución para Talavera”. Además, Gregorio defendía que el proyecto está compuesto por casi 300 páginas (291 páginas, dos vídeos y los planos de la actuación).

EL VÍDEO, EL BUROFAX Y LA HUIDA DE GREGORIO. Tras la noticia de La Voz del Tajo y el envío de un burofax por la arquitecta al alcalde en el que le pide que rectifique el anuncio y que requiera a los promotores a retirar su nombre del documento por haber usado los planos que ella creó “sin consentimiento y manipulándolos”, Gregorio intenta huir del escándalo dejando atrás a los empresarios con los que posaba y defendía sólo dos días antes.

Así, después de vender a los talaveranos y al Gobierno regional el proyecto (pidió colaboración a todo el mundo) y defender a los empresario que lo presentaban, hoy la versión del Gobierno PP-VOX cambia radicalmente y aseguran “que se trata de un proyecto privado” y desde el Ayuntamiento “únicamente nos hemos referido a una consulta que se ha hecho en el Ayuntamiento y los puestos de trabajo que se pueden crear”.

Lo llamativo de este asunto es que el alcalde defendiera a ultranza “un proyecto que va a dar un soplo de riqueza a Talavera y que puede ser algo importante para nuestra ciudad y hacer que nuestros hijos se queden aquí a vivir”, según sus propias palabras, obviando la ‘legalidad’ del mismo.

A la vista de sus declaraciones, es curioso que Gregorio se defienda de la acusación de plagio del ‘proyecto estrella’ de Talavera (recordemos que lleva dos días publicitándolo en redes sociales y notas de prensa) afirmando que el Ayuntamiento “es ajeno al proyecto” y que el equipo de Gobierno “no ha intervenido en absoluto en la documentación que la empresa ha registrado en el Ayuntamiento, porque no tenemos nada que ver con los documentos que una empresa privada registre en el Ayuntamiento, como es lógico” pese a que permite que se use el escudo de la ciudad en los mismos.

¿TODO VALE? Ante estas palabras cabe preguntarse si el alcalde acepta como válidos todos los proyectos que le presentan (a él o su equipo de gobierno), si con todos se reúne, si con todos envía notas de prensa, posa ‘orgulloso’ con los promotores o si con todos sale en los medios de comunicación defendiendo un proyecto “que a va a ser una revolución para Talavera” sin tan siquiera comprobar que reúne la condiciones necesarias (inversión, autoría…).

Por último, respecto a otro de los puntos de la defensa del alcalde en la que asevera que: “Desde el Ayuntamiento no se ha difundido ninguna documentación del proyecto como tampoco ningún vídeo ni ningún plano”, se entiende que tanto el vídeo como los documentos hechos públicos son reales; unos documentos que, por cierto, llevan también insertados el logo del Ayuntamiento de Talavera de la Reina.

Y aquí llega una de las preguntas que deja en el aire la defensa del alcalde: ¿Denunciará el Ayuntamiento a la empresa promotora de ‘La Nao Talavera’ por usar el escudo de Talavera y el membrete del Ayuntamiento en unos documentos con planos que la arquitecta Pilar Amores reclama como ‘plagiados’?