Los órganos de gobierno de Fedeto han acordado de forma unánime romper cualquier tipo de relación en la que participe, directa indirectamente el secretario general del sindicato CCOO en la provincia de Toledo, Federico Pérez, después de que éste, según la patronal toledana, haya "difamado e insultado al presidente de ésta, Javier de Antonio Arribas".
Fedeto toma esta decisión "hasta que el secretario general de CCOO en Toledo no exprese su voluntad inequívoca de respetar los valores y principios en que se sustenta el diálogo social, rectifique sus insultos, difamaciones y acusaciones falsas y abandone su actitud violenta, intimidatoria y amenazante".
Indican que "cualquier intento por parte de Pérez de seguir generando crispación o conflicto público por su lamentable comportamiento será considerado como persistencia en su negativa a respetar el diálogo social y no será objeto de contestación por parte de Fedeto salvo, en su caso, ante los tribunales de justicia".
Arribas, según ha señalado Fedeto en un comunicado, señaló que "muchas asociaciones y sectores empresariales" le trasladaban que las empresas no encuentran personas dispuestas a trabajar, y argumentaba que "parte del problema es que hay gente que está subvencionada que decide no trabajar, prefiere estar mantenida a seguir trabajando".
"En Fedeto aceptamos que no se esté de acuerdo con los argumentos expresados por nuestro presidente o con cualquiera de los postulados de nuestra organización y asumimos cualquier clase de crítica, por dura o contundente que pueda ser, si se expresa con respeto y desde la lealtad institucional que son la base del diálogo social en democracia", ha afirmado la patronal.
De este modo, señala que "el respeto y la lealtad institucional han presidido desde siempre las relaciones entre Fedeto y el sindicato CCOO en la provincia de Toledo incluso en los momentos más delicados y difíciles".
"Sin embargo, el señor Pérez, secretario general del sindicato CCOO en la provincia de Toledo, no critica el argumento del presidente de Fedeto, insulta, difama y trata de intimidar a la persona que representa a los empresarios en la provincia", explica Fedeto, añadiendo que el dirigente de CCOO "utiliza el insulto de moda: el fascismo, el descalificativo más utilizado por parte de aquellos que pretenden deslegitimar a quienes no se someten al discurso ideológico establecido".
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