La
depresión aislada en niveles altos (DANA) ha dejado estragos en la
provincia de Toledo estos últimos días con inundaciones en municipios, cortes de tráfico, problemas en la circulación por balsas de agua en un gran número de carreteras, así como crecidas de los ríos y embalses. A pesar de todo ello, también salen a la luz
gestos bonitos y solidarios ante las tempestades, como ha sido el caso de
Cruz Roja —
fotos al final de la información—.
Un total de 30 voluntarios y voluntarias de la provincia han participado en acoger en albergues provisionales a aquellas personas de los municipios de Escalona —una de las localidades más afectadas— y Villaluenga de la Sagra que no han podido acceder a sus viviendas debido a las consecuencias que ha ido dejando la DANA a su paso. Además, la organización también ha hecho entrega de mantas y de un kit de higiene personal a las personas de Yuncler, quienes lo habían solicitado a través del 112.
La Voz del Tajo ha podido hablar con María José, coordinadora de Cruz Roja, quién nos ha explicado que, a pesar de tener una estimación de albergar a 50 personas en el Polideportivo Municipal de Escalona, finalmente “por suerte” han sido muchas menos las que se han tenido que alojar.
Desde la organización se movilizaron en Escalona aproximadamente a las 11:30 horas de la mañana del pasado 4 de septiembre y por la tarde tuvieron que ir también a Villaluenga de la Sagra, donde desplegaron aproximadamente 25 camas para poder atender a la gente que llegara y lo necesitara.
“Lo que nosotros hacemos es, a través de la colaboración de nuestros voluntarios, instalamos las camas en los sitios que nos facilitan desde los ayuntamiento y atendemos necesidades que puedan tener, sobre todo en este caso el objetivo era que pudiesen tener un alojamiento alternativo donde poder hospedarse porque al final esto ha sido producido porque las viviendas en las que estaban no reunían las condiciones, en algunos sitios no tenían electricidad o no tenían agua e incluso todavía tenían bastante agua en el interior de la vivienda”, ha explicado la coordinadora.
A pesar de que muchas de las personas que se han tenido que alojar en los albergues provisionales se han ido reincorporando con familiares o encontrando sitios con amistades o conocidos, algunas personas que han tenido que quedar allí, “estaremos activos hasta que nos digan lo contrario”, ha indicado, asegurando que “a lo largo del día o de la noche la situación es cambiante y hay gente que alomejor no estaba en el día de ayer pero está previsto que se incorpore en el día de hoy, o gente que sí que había estado y al final se había podido alojar con algún familiar o algún conocido”.
Los voluntarios se están movilizando en tres turnos: mañana, tarde y noche. “Continuamos con los dos albergues hasta que la situación se vaya resolviendo y la gente pueda volver a casa”, ha concluido.