Los
juzgados y tribunales de toda España, registros civiles y el conjunto de los organismos dependientes de la Justicia se han paralizado para exigir una subida salarial digna para el colectivo de funcionarios y negociar unas funciones adecuadas a la labor que desempeñan a diario, en el marco de las futuras
leyes de Eficiencia Procesal, Organizativa y Digital.
La huelga de 24 horas, convocada por la Central Sindical Independiente de Funcionarios (CSIF) -sindicato mayoritario en la Justicia-, junto a STAJ, CCOO y UGT ha vuelto a ser un completo éxito, con un seguimiento cercano al 90 por ciento, una media de 700.000 procedimientos y actuaciones paralizadas y decenas de miles de juicios suspendidos, como el de la Gürtel en la Audiencia Nacional contra Francisco Camps.
Estimamos que, de continuar esta situación, se necesitarán hasta 2 años para recuperar el trabajo causado de momento por esta huelga. Desde CSIF, volvemos a lamentar los inconvenientes que está produciendo este conflicto a los ciudadanos, pero el último responsable es el Ministerio de Justicia, tras más de dos años y medio sin negociar estas cuestiones.
Coincidiendo con esta jornada, miles de funcionarios de toda España -cerca de 10.000- se han desplazado a Madrid para manifestarse. Las protestas ya han tenido un primer logro: el ministerio de Pilar Llop ha convocado mañana a los sindicatos para negociar.
No obstante, hasta que no haya una propuesta concreta encima de la mesa vamos a seguir en la protesta y los paros parciales continuarán de manera indefinida.
La pelota está en el tejado del Ministerio, que mañana debe acudir a la reunión no solo con palabras sino con una propuesta concreta sobre las reivindicaciones que le hemos trasladado.