El tren de larga distancia entre Madrid-Talavera y Badajoz volvió a sufrir ayer por la tarde, Día de Todos los Santos, una nueva incidencia, algo ya común en esta línea.
Según informó la empresa Adif, el larga distancia con salida desde Madrid a las 16:38 horas, acumulaba retrasos por "falta de recursos del operador"; es decir, de Renfe.
Según confirmó Renfe, lo que ocurrió es que el maquinista titular del Alvia que debía partir de Atocha con destino a la capital pacense a las 16: 38 "no se ha presentado" y el operario sustituto no tiene habilitación para manejar este tipo de convoy, por lo que se ha tenido que optar por un tren 194, regional media distancia, con menos plazas que el Alvia.
Además, según informó Renfe, se ofreció a los ocupantes del tren hacer el viaje en taxi o en un media distancia, que ha salido más tarde de lo previsto. El retraso fue de al menos 45 minutos y muchos de los viajeros tuvieron que hacer el trayecto sentandos en el suelo, pues el nuevo tren era más pequeño que el anterior y había más pasajeros que asientos.
"Cumpliremos el compromiso y como hay un retraso de más de 30 minutos, se devolverá el cien por cien del billete a todos los afectados", indicaba Renfe, que apuntaba además que se ha abierto "una investigación interna" para saber por qué el maquinista titular no se presentó y también por qué el que se ha habilitado como sustituto no dispone de la licencia para conducir el Alvia.
Mientras tanto, los viajeros han sido los perjudicados y han mostrado su indignación una vez más en redes sociales, donde han publicado fotos y vídeos de los momentos vividos en el tren: "gente tirada en el suelo, maletas en los pasillos y un montón de familias afectadas". En definitiva, critican, "lo de siempre en esta línea. Y encima tienes que estar agradecido porque te van a devolver el dinero".
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