El ayuntamiento de Santa Ana de Pusa, en Toledo, ha dado el paso de apagar parte del alumbrado público como medida de recorte para el ahorro energético.
Será solo una de cada cinco farolas, y aquellas que estén en zonas con menos vecinos, en las afueras del pueblo y en la plaza principal de la localidad, que cuenta con bastante iluminación.
Por eso, a partir de hoy mismo habrá menos luz en algunas áreas. Estiman que el ahorro mensual es significativo, aunque se busca también no perjudicar la seguridad de los vecinos.
De este modo, apagando 65 del total de las farolas del alumbrado público del municipio, el consistorio prevé ahorrarse mensualmente en torno a los 1000 euros.
Una medida que se ha hecho necesaria, entre otras cosas, porque en los últimos meses las facturas de la luz a pagar superaban los 2500 euros, lo que hace complicado afrontarlas en un municipio en el que el ayuntamiento carece de ingresos propios.
Y esta no ha sido la única medida llevada a cabo por la corporación municipal de Santa Ana de Pusa para ahorrar luz, hace unos meses sustituyeron las antiguas luces por bombillas LED.