A medida que la tecnología ha ido avanzando y mejorando, también lo ha hecho de la mano las ciberestafas que circulan por Internet. Poco a poco, los estafadores han ido perfeccionando sus técnicas a la hora de robar información o dinero a sus víctimas.
El Smishing es un nuevo método de ciberestafa en el que nos envían un SMS simulando ser el banco para robar información privada o hacer un cargo económico, normalmente se acompañan de enlaces a páginas falsas. A ellos se suman las llamadas desde números supuestamente oficiales.
Una nueva técnica en la que se nos hace más complicado detectar si es mentira, ya que se hacen pasar por entidades bancarias o financieras y utilizan sus canales de comunicación habituales sin que a primera vista se diferencien.
Un vecino de Talavera de la Reina ha vivido en primera persona esta estafa y nos ha contado su testimonio: “ayer recibo una llamada a las siete y media de la tarde del servicio de seguridad de mi banco y lo más importante: el número de teléfono era exactamente el mismo”, cuenta.
“Ni siquiera en el banco me han sabido decir cómo lo hacen”
“En esta llamada me dicen que han accedido a mi banca online y que están haciendo pagos, que les ha saltado una alerta y que si no soy yo les tengo que dar un número de 4 cifras de una tarjeta de claves. Me comentan que me habrá llegado un mensaje, que evidentemente había recibido en el mismo hilo que en el del banco”, continúa relatando.
Asegura que los estafadores le metían prisa para comunicarles la clave poniendo como excusa que si no lo hacían rápido no podrían bloquear esos pagos. Este vecino de Talavera les dijo que no podía hablar en ese momento y que en un rato les llamaría.
El hombre inmediatamente colgó y se metió en su banca digital, cuando vio que no había ningún tipo de movimiento ni pago. Tras esto, llamó al número de asistencia de su banco, quienes le aseguraron que era completamente falso, ellos no habían sido los que habían realizado la llamada y nadie había podido acceder a su cuenta ya que él no había proporcionado la clave a nadie.
En este caso en concreto ha sido en el banco Sabadell, los cuales han pedido que se comparta con el mayor número de personas posibles para que se pueda prevenir que las personas piquen con este método, ya que al aparecer en pantalla el número de teléfono de tu banco puede hacer que mucha gente caiga en la estafa.
“El tema es que tienen mi número de acceso, tienen mi DNI y tienen mi nombre, porque me llamaron por mi nombre y estaban intentando entrar y también hacer bizums. Bloqueamos la banca online y no pudieron hacer nada”, concluye.
QUÉ HACER EN ESTOS CASOS
Si los propios mensajes o teléfonos parecen reales, ¿cómo se pueden detectar las estafas? El banco central recomienda los detectores de spam que bloquean este tipo de mensajes o las aplicaciones que permiten conocer la identidad real de quien llama. También hay que desconfiar de ciertas peticiones: "desde la entidad nunca te pedirán que les facilites contraseñas o claves completas".
Además, si alguien llama diciendo que se ha realizado una operación fraudulenta, se debe cotejar. Se puede acceder a la banca online y verificar que es cierto. Otra alternativa es colgar y llamar a nuestro propio banco, como hizo este vecino de Talavera para afirmarlo.
También se debe estar alerta si no se ha hecho ninguna operación y "no tiene sentido que te llegue una clave temporal y mucho menos que el banco sea quien te la solicite verbalmente por teléfono". Tampoco hay que fiarse si se pide un código para deshacer una operación fraudulenta ya que tu banco no necesita un código para anular esa supuesta operación.