La reforma del Código Penal que prevé penas de prisión de hasta 18 meses para pequeños hurtos en caso de reincidencia ha entrado este lunes en vigor.
Fue aprobada por las Cortes hace un mes gracias a una enmienda impulsada por el PDeCat, y pactada con el PSOE, que se introdujo en el proyecto de Ley Orgánica para facilitar el acceso a la información financiera.
Según su redacción en el BOE, de 29 de julio, se modifica el artículo 234, apartado 2, para dar "una respuesta adecuada a los casos de multirreincidencia". Se explica que la reforma resulta "necesaria" porque, si bien la regulación anterior ya preveía una modalidad agravada para la reincidencia en el hurto, según doctrina del Supremo esto iba destinado para castigar los hurtos que superaran los 400 euros.
Esta interpretación del Supremo —se indica en el BOE— suponía de hecho que los delitos leves de hurto que se cometen de manera multirreincidente "no cuenten con una suficiente respuesta penal, a pesar de que son delitos que están siendo objeto de una creciente preocupación por afectar directamente no solo al turismo, al comercio y a la economía en general, sino también a la propia seguridad de los ciudadanos".
Con la reforma que entra en vigor hoy, se puede sancionar más gravemente los casos de hurtos leves no superiores a 400 euros cuando se producen de forma multirreincidente.
EVITAR DESPROPORCIÓN
El BOE recoge que para evitar el salto desproporcionado de pena criticado por el Tribunal Supremo, se opta por aumentar la pena de estos delitos de hurto leve, pero sin llegar a la pena de prisión del tipo agravado del artículo 235.1 del Código Penal.
Así, en casos de hurto leve o inferiores a 400 euros se aumenta la pena siempre que el autor sea multirreincidente y la cuantía total de lo sustraído, incluyendo los delitos de hurto cometidos con anterioridad, exceda los 400 euros.
En ese caso, la pena que se impone no es la del tipo agravado sino la básica, que es prisión de 6 a 18 meses. "De esta forma, se consigue dar a los casos de multirreincidencia una respuesta penal más disuasoria y ajustada a la gravedad de la conducta, sin incurrir en un incremento desproporcionado de la pena", apunta el epígrafe del BOE.
MEDIDA RECLAMADA POR COMERCIO Y RESTAURACIÓN
Cuando la enmienda salió adelante en el Congreso, en mayo de este año, desde el PDeCAT señalaron que esta modificación ya había sido "prometida" por varios ministros de Justicia y del Interior porque "tiene un alto impacto en el sector del comercio, la restauración, el turismo y en la seguridad de todos los ciudadanos".
A su juicio, el cambio legal permitirá "aumentar la capacidad intimidatoria y disuasoria del Código Penal" y "dotará a las administraciones de más herramientas para luchar contra la multirreincidencia en pequeños hurtos".
"Uno puede tener la sensación de que las personas que cometen estos hurtos los detienen hoy y salen mañana a la calle, y continúan con esta actividad casi como 'modus vivendi'", dijo entonces el diputado Genís Boadella, responsable de asuntos de Justicia del PDeCAT.