Los incendios forestales no dan tregua. Los declarados en Ladrillar (Cáceres) y Candelario (Salamanca) continúan activos y en nivel 2 de peligrosidad.
En total, están trabajando en el dispositivo de extinción más de 300 personas y 17 medios aéreos y el fuego ha arrasado unas 4.000 hectáreas aproximadamente (unas 3.000 en territorio extremeño y mil más en la provincia de Salamanca).
Además, los integrantes de las Brigadas de Refuerzo en Incendios Forestales (BRIF) de Pinofranqueado (Cáceres), La Iglesuela (Toledo), Puerto El Pico (Ávila), Laza (Ourense) y Tabuyo del Monte (León) se han desplazado para realizar labores de extinción.
Según la Junta de Extremadura, durante las últimas horas no se han producido novedades significativas en la evolución del incendio, que se mantiene con una evolución complicada.
Los técnicos del Plan de Lucha contra Incendios Forestales (Infoex) han informado que la noche ha transcurrido "relativamente tranquila" gracias a la estabilidad atmosférica.
Para hoy se prevén temperaturas al alza en la zona afectada con un máximo de 39 grados y vientos calmados con rachas máximas de 20 km/h, según la Agencia Española Meteorología (AEMET).
Durante esta mañana, los trabajos se están centrando en la zona limítrofe con Castilla y León, en la provincia de Salamanca.
El incendio, declarado desde el lunes en el término municipal del Ladrillar, ha obligado a evacuar de forma preventiva a cinco núcleos poblacionales, que son Batuequilla, La Horcajada, Aceitunilla, Cabezo y el propio Ladrillar. Más de 400 personas han abandonado sus hogares.
No obstante, a lo largo del día, si se dan las condiciones oportunas, está previsto que los vecinos puedan acceder momentáneamente a sus casas para recoger enseres y atender a sus animales.