En los últimos años, debido a la pandemia, ha cambiado mucho el estilo de vida de los españoles y del mundo entero. Es indiscutible que una de las grandes consecuencias que ha generado el Covid y las restricciones, es la forma de practicar deporte. Según los datos que manejan los expertos de Nutritienda, la tienda online líder en productos de salud y belleza, la práctica de deportes al aire libre ha aumentado un 80 % respecto a los años anteriores a la pandemia, sobre todo, lo que más ha aumentado, ha sido el senderismo y caminar en la ciudad. Otros deportes al aire libre que también han visto incrementados su práctica han sido: el running un 60 % y las salidas en bici un 50 %. Esta realidad ha repercutido de forma positiva en la población española que ha ganado tanto en salud como en calidad de vida.
El día que más se practica los deportes al aire libre son los domingos, especialmente las salidas en bicicleta o caminar por la naturaleza, deportes que se pueden hacer solos, pero también acompañados de familia y amigos, por eso el domingo es el día más elegido. Sin embargo, el viernes es el día que menos deportes al aire libre se hacen. Hay deportes como el running que se prefieren hacer entre semana, en concreto el día que más se practica es el martes.
Al margen de los días elegidos y del deporte que se practique lo más importante es dejar atrás una vida sedentaria y disfrutar al aire libre. Los expertos de Nutritienda.com muestran los beneficios tanto físicos como psicológicos de practicar deporte al aire libre:
AUMENTA LA FLEXIBILIDAD Y LA COORDINACIÓN
La práctica de ejercicio ayuda a mejorar la flexibilidad y potencia la coordinación, dos elementos fundamentales para disfrutar de una vida placentera e independiente, especialmente cuando las personas se van haciendo mayores. La flexibilidad es la capacidad de los músculos de adaptarse a cualquier movimiento, es fundamental para el día a día, ya que muchas lesiones que se producen son debidas a la falta de flexibilidad que repercute en la salud general. Después de practicar cualquier deporte hay que hacer estiramientos para que los músculos se relajen.
FORTALCE LOS MÚSCULOS Y LOS HUESOS
El deporte al aire libre fortalece los músculos y los huesos ya que la inactividad hace que se vuelvan más débiles y se deterioren de forma progresiva. Además, el ejercicio fortalece el esqueleto y permite que la densidad ósea se mantenga, reduciendo el riesgo de desarrollar osteoporosis y artrosis. La actividad física mejora la circulación aportando más nutrientes a los huesos y favoreciendo el depósito de calcio en ellos, esto hace que se prevengan fracturas y los huesos estén más fuertes. Al practicar deporte al aire libre se puede reducir hasta un 50 % el deterioro físico.
MEJORA LA CALIDAD DE VIDA
Practicar ejercicio al aire libre mejora la calidad y la esperanza de vida, ya que disminuye la probabilidad de sufrir enfermedades asociadas al sedentarismo como los infartos y anginas de pecho. También disminuye la posibilidad de que se formen coágulos ya que incrementa el colesterol bueno y disminuye los triglicéridos, además al estar al aire libre se puede aumentar la eficiencia de los pulmones protegiendo al organismo de enfermedades pulmonares y cardiacas.
AYUDA A EVITAR EL EXCESO DE PESO
Los deportes al aire libre ayudan a mantener un peso saludable, a mejorar la forma física y a prevenir las dolencias que puedan surgir por tener más peso del debido. Uno de los motivos es que ayuda a acelerar el metabolismo basal, que es la cantidad mínima de energía que necesita el cuerpo para mantener las funciones celulares básicas diarias. En ocasiones, el hecho de tener unos kilos de más puede incrementar la probabilidad de sufrir lesiones, por lo que el ejercicio físico siempre debe estar adaptado a nuestra condición física.
REFUERZA EL SISTEMA INMUNOLÓGICO
Con el deporte, el sistema inmunológico se hace más fuerte, sobre todo si además de entrenar al aire libre se lleva una dieta sana y se respetan debidamente las fases de recuperación tras el ejercicio, descansando las horas recomendadas. Se ha comprobado que practicar ejercicio físico moderado tiene efectos positivos en el sistema inmunitario, afecta en la regulación de leucocitos y citoquinas. No obstante, todo depende del estado de cada persona, la intensidad y duración de la actividad. Cuando uno se mantiene activo los anticuerpos que combaten las infecciones y los glóbulos blancos se mueven más rápidamente y ayudan a eliminar los problemas antes, aumentando las defensas y reduciendo la probabilidad de sufrir enfermedades.
DISMINUYE LOS NIVELES DE ESTRÉS
Uno de los mayores beneficios asociados al deporte al aire libre es la liberación de energía y la reducción de tensiones acumuladas. Cuando se consiguen disminuir las presiones emotivas y ambientales, se alejan las posibilidades de generar en el organismo radicales libres y, en consecuencia, de padecer enfermedades graves. Los deportes al aire libre ayudan a construir en las personas que los practican un mayor nivel de autoconfianza y autoestima, además, el ejercicio físico mejora la imagen de uno mismo, esto se ve incrementado al comprobar la evolución de los resultados, tanto en el aspecto físico como en las marcas personales, lo que hace que uno esté más motivado para seguir practicando deporte ayudando a combatir el estrés que se genera día a día.
El deporte produce una placentera generación de endorfinas, las llamadas hormonas de la felicidad. Esto contribuye a afrontar las dificultades del día a día de una forma más positiva. Las endorfinas son unas sustancias químicas que produce el ser humano y que estimulan el cerebro generando emociones placenteras. De esta forma, actúan como si se tratara de una droga natural que no provoca adicción, ni daños en el organismo. De hecho, debido a sus efectos, se recomienda practicar actividad física a aquellas personas que sufren depresión y/o ansiedad.
FORTALECE LA RESISTENCIA Y LA DETERMINACIÓN
Al practicar ejercicio al aire libre se recorren distancias largas, esto ayuda a fortalecer el organismo y la mente y crear resistencia, potenciando la determinación y adquiriendo una mayor disciplina. La resistencia es una de las cualidades más importantes en el ejercicio y en la vida en general, ya que ayuda a reducir las pulsaciones por minuto, fortaleciendo la musculatura del corazón y permitiendo bombear más sangre en cada latido. Esto hace que el corazón tenga que latir menos veces y se canse menos, haciendo que funcione de forma más eficiente y alargando la vida de quien hace ejercicio.
POTENCIA LA CREATIVIDAD
Al realizar un deporte al aire libre se oxigena mejor el cerebro, además, se ha visto que aumentan los niveles de producción creativa. El ejercicio ejercita el cuerpo y despierta la mente haciendo que se vean las ideas con más claridad. Es un momento excelente para reflexionar y desconectar ayudando a relajarse y pensar con fluidez y despertar el lado más creativo.
AYUDA A DORMIR MEJOR
El ejercicio es el mayor aliado para las personas que sufren trastornos del sueño, ya que hacer ejercicio al aire libre regularmente ayudará a mejorar notablemente el descanso. Está comprobado que el deporte libera el estrés y hace que uno se sienta más relajado a la hora de acostarse, esto unido a que uno se siente más cansado físicamente hará que se duerma mejor. Poco a poco las fases del sueño se irán regularizando y se sentirá más energía a lo largo del día. Es importante que no se haga el ejercicio justo antes de irse a la cama ya que el efecto sería el contrario, los expertos de Nutritienda.com recomiendan hacer ejercicio dos o tres horas antes de acostarse para que la temperatura corporal haya disminuido y ayude a conciliar el sueño y la estimulación que produce el deporte haya desaparecido.
MEJORA EL RENDIMENTO INTELECTUAL
Está demostrado empíricamente que los deportes al aire libre contribuyen a aumentar el número de neuronas en el hipocampo. Esto ayuda a crear un mayor número de conexiones entre las neuronas cerebrales y, en consecuencia, una notable mejoría en la actividad mental.
El ejercicio físico mejora funciones cognitivas como la toma de decisiones, la atención, concentración y memoria. Por otro lado, al mejorar la actividad cerebral también se mejora la memoria y la capacidad de retención que puede hacer que a largo plazo se reduzca el riesgo de demencia, deterioro cognitivo y Alzheimer.