Llega la primavera y con ella el buen tiempo. Sin embargo, nuestra exposición al sol aumenta y esto podría reflejarse en el estado de nuestra piel. Por ello, a continuación, os dejamos unos sencillos consejos para cuidar la piel.
Ana Molina, especialista en Dermatología, Tricología y Estética, ha hablado de la “mejor rutina científicamente” para el cuidado de la piel. Una rutina y sencilla que tan solo contiene 4 pasos:
- Una buena limpieza de la piel por la mañana y por la noche. Para ello es necesario usar un buen producto de limpieza facial como es el agua micelar.
- Una buena hidratación a base de un cóctel de antioxidantes por la mañana, con algún sérum o una crema hidratante.
- Buena fotoprotección frente a la radiación ultravioleta A y B, infrarrojos y luz visible.
- Transformación por la noche. Volver a limpiar la piel y aplicar productos que frenen el envejecimiento para ayudar a la piel a regenerarse y verse así más luminosa y bonita.
La doctora Molina además ha querido hacer hincapié en los productos que cumplen más de una función como es el caso de los fotoprotectores con color o antioxidantes, o como es el caso del agua micelar que tonifica y calma la piel.
“Los dermatólogos siempre hemos defendido que menos es más, por eso solemos recomendar una rutina sencilla, ya que esto facilitará su cumplimiento”, ha indicado.
CUIDADO CON LOS RAYOS DE SOL
Molina ha destacado que “para los dermatólogos el bronceado saludable no existe porque todos los efectos que tiene el sol sobre la piel son negativos, produce inmunosupresión, cáncer de piel y nos envejece”.
Sin embargo, ha resaltado que el sol en el resto de órganos es beneficioso y además tiene efectos positivos sobre el estado de ánimo, el sistema musculoesquelético o el sistema cardiovascular, por ejemplo. Por ello, recomienda tomar algo de sol para sintetizar vitamina D, pero a ser posible protegiendo el rostro y no hacerlo en las horas centrales del día.
“La cara no es negociable. Hay que hacer en ella una fotoprotección estricta y es nuestra carta de presentación y el sol es lo que más nos envejece. El 70% del envejecimiento está relacionado con el sol”, ha concluido.