El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, considera "prudente" y "consecuente con el nivel de solución" que se le ha dado al coronavirus entre todos en España la decisión de que las mascarillas dejen de ser obligatorias en espacios interiores el próximo 20 de abril, fecha en la que se publicará en el Boletín Oficial del Estado (BOE) el Real Decreto que lo regula y que, el 19 de abril, se aprobará en el Consejo de Ministros.
Desde Hospitalet de Llobregat (Barcelona), donde asiste a la feria Alimentaria, García-Page ha valorado que tanto el Ministerio de Sanidad como todos los gobiernos autonómicos se hayan puesto de acuerdo en Toledo, donde se celebra la reunión del Consejo Interterritorial, para adoptar esta decisión.
"La diferencia entre el respeto al COVID y el miedo al COVID es notable, es lo importante, y los españoles nos hemos ganado el no tener que tenerle miedo al COVID, aunque sí respeto y sí prudencia", ha destacado, para alegrarse de "empezar a poder normalizar la convivencia" especialmente "en un momento en el que España necesita como nunca tirar para adelante desde el punto de vista económico, social y cultural".
Ha recordado que ya se venía trabajando para que el país "vaya culminando su periodo de desacoplamiento a las restricciones" y ha añadido que los datos que hay sobre la mesa "permiten trabajar con prudencia". "Hemos sido duros cuando había que serlo y ahora proporcionalmente al esfuerzo que ha hecho la gente conviene acoplarnos a medidas muchísimo más normales, más de convivencia habitual", ha indicado.
Aunque ha declarado que quien quiera pueda seguir haciendo uso de la mascarilla porque "siempre hay un margen de voluntariedad y de respeto individual", ha apuntado que la decisión adoptada es "importante", teniendo en cuenta que después de Semana Santa "empieza toda la temporada alta de conectividad, de la conexión de los españoles", por lo que ha deseado "que esto nos vaya bien".
Emiliano García-Page ha valorado que España en este sentido "ha cumplido muy por encima del estándar europeo", ya que ha vacunado y se ha disciplinado "muy por encima" del mismo, por lo que, a su juicio, "puede tomar esta decisión sin miedo" aunque con respeto.
Sobre la aplicación de la medida, ha asegurado que se pondrá en marcha en cuanto se formalice a nivel nacional, pues "las decisiones son más útiles cuando son para el conjunto, para todos, se explican mejor, y no entramos en un guirigay ni en un caos".
"Ahora estamos en una etapa muy serena en la que todos estamos de acuerdo en que hay que salir juntos de la pandemia. No salir juntos significa no salir todos y por tanto poder caer otra vez juntos", ha apreciado.
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