Define la RAE soterramiento como “acción y efecto de soterrar”, es decir poner debajo de tierra, esconder o guardar algo de modo que no aparezca. ¿Se puede dudar que desde hace mucho tiempo para los intereses de las administraciones autonómica y estatal, Talavera de la Reina se encuentra enterrada, escondida y desaparecida? Yo creo que no.
Contemplo como desde las redes sociales y otros ámbitos se viene realizando una bien intencionada campaña exigiendo el soterramiento de las vías del tren de alta velocidad a su paso por Talavera. Es lógico pedir que ese tren, que para ir desde a Extremadura a Madrid, pasando por Toledo, no lo olvidemos, necesita pasar por nuestra ciudad, no nos suponga una cicatriz urbana para un posible crecimiento.
Bien intencionada la campaña, sí. Pero a la vez olvida la raíz de uno de nuestros principales problemas que no es otro que un absoluto déficit en infraestructuras. Déficit reconocido por todos los gobiernos y que ha servido de eterna promesa siempre incumplida. Talavera es fuente inagotable de dos cosas: de rotondas y de borradores de anteproyectos de estudios preliminares al informe previo no vinculante de la memoria explicativa del memorándum justificativo de la necesidad de iniciar la toma de decisión de la puesta en marcha de las consultas para llevar a cabo el procedimiento de adjudicación de la planificación de la mesa de redacción del citado borrador de anteproyecto. Las rotondas, con mayor o menor éxito, pueden verse y tocarse.
Nudo logístico, radial hasta Madrid, desdoblamiento de la entrada a la autovía a Talavera, Universidad y hospital privado, tren digno, lluvias de millones, 5G, etc. etc. Promesas incumplidas y realidades existentes. Cierre de industrias y comercios, pérdida de población, deterioro urbano. Año tras año cuesta abajo y sin frenos, y mientras tanto nuestros dirigentes vendiendo el humo de la pólvora. ¡Qué se puede esperar cuando hace pocos meses, en pleno 2021, se presenta como un gran logro en el desarrollo local que por fin los teatros municipales pueden cobrar con tarjeta!
Las falsas promesas incumplidas de los políticos son como el resto de las mentiras, la mas reciente para tapar la anterior ha se ser más gorda. Y así andamos, soterrados y a la espera de escuchar tal vez que seremos capital de España o sede de la ONU. Una más para la colección y mientras tanto en la Plaza del Pan obedientes con quien allí les aupó. Al menos que algunos si prosperen en Talavera.