La Guardia Civil ha detenido a un hombre como presunto autor de estafar a diversos cazadores de las provincias de Albacete, Alicante, Córdoba, Málaga y Valencia. Además, por estos hechos, se ha investigado también a una mujer que hacía de "mula bancaria" para el detenido.
El estafador, al cual le constaban ocho requisitorias judiciales en vigor en el momento de la detención, fue entregado a la autoridad judicial competente, quien ha decretado su puesta en libertad con medidas cautelares, así como el bloqueo cautelar de una cuenta bancaria, informa el Instituto Armado.
A finales del mes de julio del pasado año, varios cazadores de la provincia de Alicante interpusieron sendas denuncias ante la Guardia Civil de Alicante porque al parecer había una persona que les había estafado con la venta de puestos de caza para participar en una tirada de palomas torcaces en una finca de la provincia de Ciudad Real.
Los perjudicados realizaron pagos individualizados, con cuantías económicas que oscilaban entre los 100 y 500 euros, pero dicha tirada nunca se realizó en lugar y tiempo acordado, así como tampoco les fueron devueltos los importes abonados para ella.
Iniciadas unas investigaciones previas por los miembros del equipo ROCA de la Compañía de la Guardia Civil de Ibi, apreciaron que esta supuesta estafa era de mayor magnitud de lo apreciado en un principio, y que también habían afectados en las provincias de Albacete, Córdoba, Málaga y Valencia.
MODUS OPERANDI
Para esclarecer los hechos denunciados decidieron dar inicio a la operación Delmont. En una primera fase, analizaron el modus operandi. El presunto autor, para atraer a sus potenciales víctimas, obtenía por diferentes medios la información de la finca que iba a ser utilizada como "gancho", posteriormente utilizaba dicha información para realizar un anuncio en páginas webs especializadas en la compra-venta de productos entre particulares, y finalmente aportaba un número de cuenta, en el cual él era el titular, para realizar el pago mediante transferencia bancaria de los supuestos puestos de caza.
Para obstaculizar el seguimiento del dinero defraudado, transfería las cuantías económicas obtenidas de forma ilícita a una segunda cuenta bancaria, a nombre de otra persona, que tan pronto como recibía este ingreso, lo sacaba de la cuenta y se lo hacía llegar a él en mano.
Detrás de esta segunda persona, estaba la figura de una "mula económica", se trataba de una mujer, sin antecedentes policiales, nacionalidad española y de 29 años de edad. La misma fue investigada por la Guardia Civil en el Puesto de la Guardia Civil de Moriles (Córdoba) por su presunta participación en 12 delitos de estafa.
Tras analizar la información obtenida, los agentes llegaron a la conclusión de que dicha mujer había sido captada por el estafador mediante una supuesta oferta de trabajo de fácil acceso y bien remunerada, y que sin embargo la hacía cómplice del delito.
La mujer, que desconocía el origen de los ingresos que recibía, se quedaba con un pequeño porcentaje del dinero transferido a su cuenta, como pago del servicio que hacía para el verdadero artífice de la estafa.
ESPECIALIZADO EN ESTAFAS
En la siguiente fase, los investigadores llegaron a la conclusión que se encontraban detrás de una persona especializada en este tipo de estafas, y tras identificarlo pudieron apreciar el historial delictivo de esta persona.
Estaban ante un hombre de nacionalidad española, de 44 años de edad, que se inició en este tipo de delitos en el año 2009, que ha sido detenido en 19 ocasiones y que, incluso, ha cumplido condena en dos ocasiones por hechos similares.
Una vez identificado al único cabecilla de estas estafas a la Guardia Civil, solo le quedaba una última fase, la detención del sujeto. La localización del presunto autor no fue sencilla para los investigadores, que finalmente dieron con su paradero en Córdoba, motivo por el que solicitaron la colaboración del equipo ROCA 31 de la Comandancia de la Guardia Civil de Córdoba, destaca la Benemérita en un comunicado.
El día 23 de marzo, fue localizado en plena vía pública en la localidad de Córdoba. Al percatarse de la presencia policial, intentó huir y oponer resistencia a la detención. No obstante, la operación finalizó con éxito, y el presunto estafador fue detenido.
En el momento de su detención, le constaban ocho requisitorias judiciales en vigor de búsqueda, detención y personación dimanantes de juzgados de diferentes comunidades autónomas.
El detenido fue inmediatamente puesto a disposición del Juzgado de Instrucción de Guardia de Córdoba, que ha decretado su libertad provisional con cargos, y además ha bloqueado de forma cautelar la cuenta bancaria utilizada en la comisión de estos hechos ilícitos.
La Autoridad Judicial competente para entender de las diligencias instruidas por el equipo ROCA de Ibi, el Juzgado de Instrucción Número 3 de Alcoy, será el que, una vez que reciba todas las actuaciones, determine el grado de participación atribuible a cada uno de los presuntos autores.