Tras mucho de tiempo de espera parece que las obras para el apuntalamiento y apeo del cuartel de la Guardia Civil de Calera y Chozas van a llevarse a cabo. El Ministerio de Interior ha publicado este mes en el Boletín Oficial del Estado (BOE) la formalización del contrato para la puesta en marcha de las obras.
El edificio, levantado a comienzos del pasado siglo, lleva 40 años en malas condiciones y hasta el momento no se ha hecho ningún tipo de conservación. Hasta tal punto, que los agentes lo abandonaron en 2008 por el riesgo de derrumbe y desde entonces permanece vacío. Actualmente, los agentes del cuerpo de seguridad trabajan desde una oficina de las dependencias municipales.
Las obras han sido adjudicadas a la empresa Restauración Estructural entre seis propuestas por 104.338 euros por parte de la Subdirección General de Gestión Económica y Patrimonial del Ministerio del Interior.
El Ayuntamiento de la localidad ha insistido continuamente a la Dirección General de la Guardia Civil que agilicen tal proceso antes de que la situación empeorase. Pues el Consistorio cedió el inmueble a la Dirección General en 1980, aunque ya se utilizaba desde muchos años antes como cuartel.
El gran coste de mantenimiento del edifico obligó a la cesión de este a la Guardia Civil. Sin embargo, han pasado los años y nadie ha invertido en su conservación en las últimas cuatro décadas. Todo esto a pesar de que el edificio está incluido en la Carta Arqueológica firmada por la Junta de Comunidades y merece una conservación.