El Consejo de Gobierno ha aprobado el Plan de Medidas Antifraude de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha cuyo objetivo es garantizar que los proyectos que se pongan en marcha con los fondos europeos Next Generation salgan adelante con toda la seguridad, garantizar una recuperación sostenible y al mismo tiempo promover las prioridades ecológicas y digitales marcadas por la Unión Europea, asegurando el correcto uso de los fondos para estos fines.
Blanca Fernández, la consejera de Igualdad y portavoz ha comentado que este Plan es una medida obligatoria para todas las administraciones que gestionen los fondos correspondientes al Mecanismo de Recuperación y Resilencia, lo que significa que todas están obligadas a contar con un plan en los términos fijados en la normativa de los fondos. Además, en el Plan de Medidas se plantea extender esta cultura al personal de la Administración Regional, por lo que se recoge un conjunto de valores y principios orientados a fortalecer la lucha contra el fraude
Esta normativa supone un refuerzo de las medidas de fiscalización y control que ya existen tanto a nivel nacional como regional, y además de transparencia, con la Ley 19/2013, de 9 de diciembre, de transparencia, acceso a la información pública y buen gobierno y en el ámbito autonómico la Ley 4/2016, de 15 de diciembre, de Transparencia y Buen Gobierno de Castilla-La Mancha que, en su artículo 35, describe los principios generales y de actuación que deben guiar a los altos cargos de la Junta.
Con respecto al contenido del Plan, este establece una serie de medidas de prevención del fraude, también incide en el impulso a la cultura ética de lucha contra el fraude, acciones formativas en materia antifraude, la evaluación específica del riesgo, impacto y probabilidad de riesgo de fraude. Además, el acuerdo contempla una declaración institucional que contiene el compromiso al más alto nivel para combatirlo.
La participación de Castilla-La Mancha en los fondos Next Generation EU en sus diferentes mecanismos se cifra en aproximadamente en 1.500 millones de euros por el momento. Estos millones se distribuirán en cinco grandes ejes: políticas de los cuidados (atención social, dependencia, sanidad e igualdad); transición energética (movilidad, energías renovables y rehabilitación de vivienda); medio ambiente (recursos naturales, economía circular y desarrollo rural); conocimiento (educación, formación y cohesión) y cohesión territorial e impulso al turismo. Estos cinco ejes permitirán la realización de unas 2.000 actuaciones en sectores estratégicos en los próximos tres años.
Para la finalizar, Blanca Fernández ha querido recordar que “en Castilla-La Mancha, la llegada de los fondos europeos nos pilla con los deberes hechos porque hemos ido tomando las decisiones necesarias para agilizar la tramitación de los proyectos”.