La dirección española de la multinacional estadounidense Schreiber Foods alcanzó ayer in extremis un preacuerdo con los representantes de sus trabajadores para firmar su convenio colectivo y evitar las huelgas que iban a comenzar el próximo lunes en sus factorías de Noblejas y Talavera de la Reina, ambas en la provincia de Toledo.
El preacuerdo, que ha sido refrendado por las asambleas de trabajadores celebradas por turnos a lo largo de la mañana de hoy, se alcanzó ante el Jurado Arbitral de Toledo tras una larguísima negociación que comenzó el viernes de la semana pasada y que no concluyó hasta bien avanzada la tarde de ayer miércoles.
El acuerdo logrado finalmente en Mediación evita el calendario de huelgas a iniciar el lunes de la próxima semana y que había sido convocado por los tres sindicatos con representación en los comités de empresa, CCOO, USO y UGT, a instancias de ambas plantillas, tras quedar totalmente bloqueada a la vuelta del verano la negociación del convenio, caducado en diciembre del año pasado.
El convenio, que afecta a las 800 personas que integran las plantillas de Noblejas (500) y Talavera de la Reina (300), tendrá vigencia desde el pasado 1 de enero hasta el final de 2024.
Establece para 2021, con efectos retroactivos desde enero, una subida salarial igual al IPC con el que concluya el año, comenzando la empresa a abonar un adelanto del 2% este mismo mes de octubre.
El incremento salarial del 2022 será del 1,8%; y del 1,7% tanto en 2023 como en 2024. En previsión de posibles desmanes del IPC, como está ocurriendo en estos últimos meses, se incluye clausula de revisión salarial, sin tope, para los cuatro años de vigencia del convenio.
El acuerdo incluye también una reducción de las seis horas en la jornada anual a lo largo de estos cuatro años; así como mejoras en las licencias retribuidas, en la IT y en ayudas sociales.
La presidenta del comité de empresa de la planta de Noblejas y responsable de la sección sindical de CCOO -mayoritario en Schreiber Foods-, Cristina Ramírez, valoró el nuevo convenio, “que es una mejora importante sobre nuestro convenio actual. Después de una dura negociación, gracias a la determinación de los trabajadores, a su decisión y a las movilizaciones, hemos sido capaces de llegar a un buen acuerdo, que es justo y merecido.”
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“En tiempos tan delicados como como los que hemos vivido debido al virus, los trabajadores hemos estado al pie del cañón, cumpliendo con nuestras obligaciones; incluso cuando la Filomena azotó con violencia. Al igual que nosotros cumplimos con nuestras laborales, es de justicia que la empresa respete y mejore nuestros derechos.”
Por su parte, Jesús Félix Roldán, miembro de la ejecutiva regional de CCOO-Industria responsable de la negociación del convenio, destacó “lo mucho que ha costado alcanzar el acuerdo. Sin el impulso, la exigencia y el respaldo constante de los trabajadores, hubiera sido imposible mover la voluntad de la empresa, que durante meses y meses planteó unas propuestas inaceptables y que no se compadecen con la buena marcha y las buenas perspectivas de Schreiber Foods en España, que lo son gracias a sus trabajadores y trabajadoras”.
“A la postre, el convenio acordado es positivo para las plantillas y creemos que también lo es para la empresa, una compañía líder en su sector por producción, por beneficios y por empleo. Una empresa que es además referente entre las industrias agroalimentarias de Toledo y de CLM y en la que las relaciones laborales siempre se han gobernado con diálogo y buen entendimiento. Queremos que siga siendo así en lo sucesivo”.
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