El Ayuntamiento de La Línea de la Concepción, en el gaditano Campo de Gibraltar, consciente de sufrir endémicamente entre otros factores negativos, unas cifras de paro grandísimas, una nula industrialización, carencias graves en servicios y transportes, un nivel de formación bajo y el total abandono por parte de la Comunidad Autónoma andaluza, va a proponer un referéndum a sus ciudadanos con la siguiente pregunta "¿Cree usted conveniente que el Ayuntamiento de La Línea de la Concepción eleve al Gobierno y a las Cortes Generales una petición para instar a la conversión del municipio en comunidad autónoma, de acuerdo con lo previsto en el Artículo 144 a) de la Constitución?".
La desidia de todas las administraciones para con este municipio, su progresiva degradación, la falta de futuro para los jóvenes, un desempleo indestructible y un permanente descenso de la población les ha movido también a tomar esa medida extrema, al sentirse sobre todo, ignorados por la Junta de Andalucía. ¿Les suena este panorama? A mí por desgracia, sí. Talavera de la Reina reúne todos y cada uno de los tristes motivos que llevan a este municipio de Cádiz a pretender constituirse en ciudad autónoma.
El alcalde de La Línea al ser preguntado por los periodistas por los motivos de esta iniciativa les respondió: “La consulta popular para la conversión en Ciudad Autónoma es la forma que se nos ocurre de solventar la actual situación. Esta ciudad está infrafinanciada y ha sido maltratada históricamente. Alguna solución tenemos que buscar y estamos convencidos de que esta fórmula puede ser la adecuada". ¿No es es esta la realidad de Talavera? ¿Se ha visto algún cambio positivo en estos casi 40 años de Comunidad Autónoma? No. Pues entonces, no es descabellado pensar que esta sería una senda para que nuestra ciudad sea resarcida de su proverbial marginación.
Este proceso es largo y de muy difícil éxito. Si la consulta —en caso de celebrarse— obtuviese el mayoritario sí de los ciudadanos se convertiría ya en una petición formal que se formularía al Gobierno, el Congreso y el Senado. Posteriormente, sería necesario redactar una ley orgánica que invocase la aplicación del artículo 144 a) de la Constitución “por motivos de interés nacional” que es justo el apartado que refiere la posibilidad de autorizar “la constitución de una comunidad autónoma cuando su ámbito territorial no supere el de una provincia”.
Nadie en su sano juicio negará que esta aventura iniciada en el sur de España, por múltiples motivos, carecerá casi seguro del resultado final previsto por el alcalde de La Línea, pero nadie podrá negar tan poco, que esa decisión valiente está consiguiendo que toda España visibilice la gravísima situación de una ciudad y cómo las administraciones públicas, empezando por la autonómica, hacen oídos sordos de forma continuada a sus ruegos y peticiones.
Pero no todo son similitudes entre Talavera de la Reina y la ciudad del Estrecho. Una gran diferencia nos separa. El alcalde de La Línea obtuvo la mayoría absoluta en las elecciones de mayo al frente de la candidatura independiente “Linenses 100x100”, que surgió ante la servidumbre y servilismo de los partidos tradicionales a sus intereses partidistas, por encima de los de localidad, tal y como aquí siempre, esté quien esté, ha ocurrido. La pregunta surge con fuerza ¿ha llegado la hora de romper la baraja y abandonar a aquellos que tienen abandonada, marginada y discriminada a Talavera? . Quedan dos años escasos para las elecciones, juzguen ustedes mismos.