La alcaldesa de Talavera, Tita García Élez, ha agradecido a la ciudadanía por “seguir manteniendo viva la llama y la esencia que Joaquín Benito de Lucas es para Talavera”. Así lo ha destacado reconociendo que hoy es un día en el que se “mezclan sentimientos”, tristeza por su reciente pérdida y también satisfacción por este “reconocimiento” para el hombre, el poeta, el profesor, el padre, abuelo e Hijo Predilecto de Talavera que “es y seguirá siendo”.
Así lo ha destacado la regidora talaverana antes del descubrimiento de dos placas cerámicas con el nombre del poeta y que darán nombre al parque situado junto al Puente Romano a la altura de la Ronda del Cañillo, tal y como aprobó el Pleno municipal a propuesta del equipo de Gobierno. El concejal de Promoción Cultural, Carlos Gil, ha conducido el acto en el que también han estado presentes ediles del Gobierno municipal, como Luis Enrique Hidalgo, Nuria Sánchez y Daniel Tito, además de otros de la Corporación o los exalcaldes José Francisco Rivas y Javier Corrochano.
No han faltado, por supuesto, sus tres hijos: Panchi, Joaquín e Inés, así como sus hermanas, nietos y otros familiares, amigos y compañeros del mundo cultural y de la poesía.
FIGURA VINCULADA A ESTA ZONA JUNTO AL PUENTE ROMANO Y EL RÍO TAJO
Este ha sido un “regalo que la ciudad quiere hacer al poeta”, un hombre que “conseguía a través de sus versos lo que otros no pueden”. Refiriéndose a este parque, donde se ubicaba la casa de los abuelos maternos donde esta figura nació, ha vinculado la persona de Joaquín Benito de Lucas al Puente Romano y al río Tajo que “tanto reivindicó en su poesía” y que le sirvió de inspiración en sus obras.
LEGADO “IMPAGABLE” DE SU POESÍA
El Hijo Predilecto de Talavera deja un “legado impagable” a la ciudad, “un regalo que ha hecho a la ciudad, con la humildad que siempre le caracterizaba, y que nos llega al corazón”. Del mismo modo, ha sostenido que en cada uno de sus versos nos hacía ver “cuán importante es la poesía y la cultura en una ciudad como ésta”.
“NO HUBIERA SIDO QUIEN FUE SI NO HUBIERA NACIDO EN TALAVERA”
Su hija Panchi ha manifestado que Joaquín “no hubiera sido quien fue si no hubiera nacido en Talavera”, ciudad que “llevaba con orgullo a los lugares del mundo que ha visitado” y donde, sin duda, “siempre quería volver”.