Toledo recompensará a sus habitantes por reciclar latas y botellas

La ciudad de Toledo se ha convertido en el primer municipio de Castilla-La Mancha que recompensará a sus habitantes por reciclar en los contenedores amarillos --los correspondientes a envases de plástico y latas--, gracias a una iniciativa puesta en marcha por Ecoembes y el Ayuntamiento toledano por la que los ciudadanos podrán, a través de una app móvil, justificar los envases que reciclen y así poder realizar donaciones a causas sociales o ambientales o recibir recompensas sostenibles.

Así lo han explicado este martes la alcaldesa, Milagros Tolón, y el consejero delegado de Ecoembes, Óscar Martín, que ha afirmado que el procedimiento para recibir estos premios por reciclar es "muy sencillo".

Así, los ciudadanos podrán descargarse la app en sus dispositivos móviles, e ir escaneando desde casa con ella el código de barras de las botellas y latas que reciclen, para posteriormente hacer una foto al código qr del contenedor en el que las deposite. Una vez hecho esto, la app cargará directamente las recompensas que reciben los ciudadanos por su reciclaje.

Martín ha incidido en que este es un proyecto "pionero" que llega para "revolucionar" la forma en la que se recicla. "El reciclaje se ha convertido en el gesto en casa, de ese ecologismo doméstico, más asentado entre los ciudadanos", ha defendido, argumentando que en Toledo las cifras no dejan de crecer, ya que el año pasado se recogieron casi 11 kilogramos de envases por habitante, un 14% más que el año anterior.

"Son buenos datos pero no podemos parar, tenemos que seguir", ha insistido, considerando como "una gran noticia" la llegada de esta iniciativa a Toledo, que está permitiendo "abrir esa mancha de compromiso" con el reciclaje en toda España.

El consejero delegado de Ecoembes ha detallado que este sistema de "reciclaje y recompensa" ya se encuentra activo en 40 ciudades de Cataluña y también ha llegado a Islas Baleares, Comunidad Valenciana, Andalucía, Comunidad de Madrid, País Vasco, La Rioja y Galicia, entrando por primera vez en Castilla-La Mancha ahora a través de su capital.