Conflicto vecinal en Torrijos por los vapores y ruidos de una Tintorería

Vibraciones, ruidos, vapores y fuerte emisión de sustancias químicas, son las razones fundamentales por las cuales los vecinos de estas comunidades afectadas llevan más de 5 años denunciando por escrito los hechos al Ayuntamiento.

En los 2 últimos años estas denuncias se han elevado directamente al Alcalde, el cual se ha reunido en varias ocasiones con los vecinos, sin ofrecer solución alguna y, por el contrario, le ha concedido a la empresa responsable, una licencia de ampliación de actividad obtenida mediante la aportación de documentación irregular. Esta nueva licencia no ha hecho sino multiplicar los perjuicios generados a los vecinos.

Estos llevan años quejándose de olores, vapores, ruidos, vibraciones —hechos que además se han dado fuera del horario comercial incluso en domingos— la actividad que desempeña la empresa es de limpieza en seco la cual utiliza productos químicos catalogados como potencialmente tóxicos por lo que los vecinos ante el olor que dicha empresa produce temen por su salud además de por su seguridad, ya que, al no cumplir con las medidas de seguridad expuestas en sus proyectos para la concesión de sus licencias como es la existencia de equipos de filtrado, equipos de extracción, chimeneas, equipos de protección eléctricos, etc y de los cuales carecen de todos ellos y así lo ha podido ratificar un perito a las comunidades de vecinos afectadas el riesgo de accidente, como el de un posible incendio, es muy grande.

No están siendo sólo los vecinos afectados los que están alzando la voz sino otros empresarios que ven en este favoritismo una absoluta discriminación frente a ellos que sí cumplen con las ordenanzas urbanísticas y demás normas.

Estas dos comunidades de vecinos son las denunciantes ante el Ayuntamiento por ser donde está ubicada la tintorería, pero el problema de olores y vapores —probablemente muchos de ellos tóxicos—, afecta a todas las comunidades colindantes a dicha actividad.

A día de hoy dicha actividad sigue ejerciéndose en todos sus locales, por lo tanto, el fuerte olor a químico, los ruidos, las vibraciones y los vapores siguen estando presentes diariamente en las vidas de los vecinos generándoles grandes molestias en su vida diaria, llegando alguno de ellos a tener que abandonar sus viviendas entre otras cosas debido al gran sufrimiento que les estaban generando estos problemas.