El Consejo de Gobierno de este jueves ha aprobado el paquete de ayudas que, dotado de 65 millones de euros, pretende compensar a los sectores económicos que se están viendo más afectados por la pandemia sanitaria causada por el COVID-19, autónomos y PYMES. Entre los beneficiarios se sitúan los empresarios de la venta ambulante, los feriantes o los del ocio nocturno, siempre que acrediten pérdidas de hasta el 40% de su facturación entre marzo y diciembre del pasado año.
Así lo ha indicado la consejera de Economía, Empresas y Empleo, Patricia Franco, que en la rueda de prensa posterior al Consejo ha avanzado que en próximas semanas, el Ejecutivo regional aprobará otro decreto de ayudas dotado de cinco millones dirigido a empresas que, a causa del COVID-19, se hayan reconvertido y aborden nuevos modelos de negocio.
La consejera ha remarcado que las cuantías aprobadas en Castilla-La Mancha son “las más altas de todo el país”.
Respecto a los 65 millones de ayudas aprobados este jueves, que podrán solicitar a partir del martes, Franco ha explicado que se dividen en dos líneas. La primera, para autónomos sin asalariados, contará con 23 millones, pasando de 1.500 a 2.100 euros por solicitante.
En el caso de la segunda línea, para autónomos con asalariados y pymes con hasta 250 trabajadores, contará con 37 millones. Las cuantías se calculan en función de los trabajadores que tengan a su cargo:
4.000 euros para las que tengan hasta 5 trabajadores a tiempo completo
6.000 euros: entre 5 y 10 trabajadores
8.000 euros: entre 11 y 25 trabajadores
10.000 euros: entre 25 y 250.000 trabajadores
REQUISITOS
Para poder solicitar las ayudas, las empresas deberán acreditar al corriente de pago.
Además, deben tener una pérdida de ingresos del 40 por ciento o más desde abril a diciembre, en comparación con el mismo periodo de 2019.
Las ayudas van ligadas al mantenimiento de la actividad durante un año, así como a la preservación del 80% del empleo también durante un año.