El Gobierno de Castilla-La Mancha no ve motivo para relajar las nuevas medidas especiales contra el coronavirus decretadas hace el pasado 19 de enero, informa CMMedia. Se trata de una decisión que, salvo sorpresa, se tomará mañana.
Así, se mantendrían las medidas indefinidas pero revisables cada diez días. Se mantendrá pues, en toda la región, nivel 3 reforzado, confinamiento perimetral municipal y toque de queda a las diez.
Será este jueves, como ya adelantó el vicepresidente, José Luis Martínez Guijarro, cuando el Consejo de Gobierno, en sesión extraordinaria, decida mantener o flexibilizar las medidas adoptadas la pasada semana para frenar el nuevo avance de la pandemia.
SESCAM
El Comité Técnico Ejecutivo de Respuesta Frente al Coronavirus se ha reunido hoy en Toledo bajo la presidencia del jefe del Ejecutivo de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, con el fin de evaluar las medidas adoptadas en las últimas semanas para la prevención de contagios y el incremento de la presión asistencial en el sistema sanitario público regional.
La directora gerente del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha, Regina Leal, que ha asegurado este miércoles que los casos por COVID-19 se están estabilizando en la región, ha incidido en la necesidad de seguir con las medidas sanitarias adoptadas por el Ejecutivo regional, "si no todas, gran parte".
"En menos de una semana estamos consiguiendo transformar esa pendiente en meseta", ha señalado Leal, quien no obstante ha mostrado la necesidad de seguir siendo prudentes "y continuar con las medidas establecidas. "Si no todas, con gran parte de las que habíamos establecido e ir procediendo a un levantamiento de las restricciones de manera paulatina", ha dicho.
Leal, según ha informado en nota de prensa el Gobierno regional, ha insistido en que las medidas que se adoptaron a principios de este año en el área sanitaria de Manzanares, posteriormente en toda la provincia de Ciudad Real y finalmente en toda la región "están consiguiendo estabilizar una curva intensamente ascendente".
En la reunión de este Comité, ha explicado, los técnicos de la Consejería de Sanidad están exponiendo cuestiones como la incidencia, "principal indicador que nos alarma y avisa de la situación y que nos marca los criterios para establecer los recursos sanitarios necesarios".
"En la primera oleada tomábamos medidas cuando veíamos que la presión asistencial en los hospitales estaba ya desbordada, pero en esta nueva ola epidémica las adoptamos con anterioridad porque tenemos rastreadores, tenemos PCR y tenemos medios suficientes para tomarlas mucho antes", ha explicado.
A este respecto, ha detallado que la incidencia se ha estabilizado y parecer estar en ligero descenso con respecto a la semana anterior. "No podemos lanzar las campanas al vuelo, tenemos que ser prudentes, pero sí estamos razonablemente tranquilos porque las medidas que hemos tomado en las primeras semanas de enero han dado resultado y ese efecto va en paralelo al descenso de incidencia", ha remarcado la directora gerente del Sescam.
Por otra parte, ha señalado que la presión asistencial en los hospitales se mantiene en las camas convencionales y se ha incrementado ligeramente en las camas de Cuidados Intensivos. "Hemos conseguido que esa presión asistencial no llegue a los picos a los que llegamos en la primera ola", ha afirmado.
Finalmente, con respecto a la campaña de vacunación, la directora gerente del Sescam ha comentado que en Castilla-La Mancha ya se ha vacunado en los centros sociosanitarios, a los profesionales sanitarios de primera línea y prácticamente a todos los del sistema sanitario público, y, a continuación, se iniciará los del sector privado.
"Llevamos un ritmo de vacunación que es muy bueno y supera el 80%", ha indicado Regina Leal, quien ha añadido que en Castilla-La Mancha se está vacunando al ritmo que los laboratorios están suministrando las vacunas.
"Confiamos en que ese número de vacunas se incremente en breve porque estamos muy preparados para seguir vacunando para poder aumentar el ritmo de vacunación", ha concluido.