Ecologistas en Acción y la Sociedad Albacetense de Ornitología han asegurado este jueves que han podido confirmar "por diversas fuentes" que se está produciendo "un fraude" en la concesión de licencias de caza en Castilla-La Mancha y que tiene su origen en Aragón. Fraude que podría estar extendido por otras comunidades autónomas, advierten en nota de prensa.
"La práctica fraudulenta se ha producido para sortear el requisito de superar la prueba del examen del cazador. En Castilla-La Mancha dicha prueba es presencial y contiene materias específicas de la legislación regional en cuestiones de caza y de protección de especies y espacios naturales. Sin embargo, las convocatorias para estos exámenes se realizan una o dos veces al año, por lo que si no se ha pasado a tiempo, quienes deseen disponer de licencia en la región tienen que esperar", explican sendas organizaciones.
Para evitarse esa espera, añaden, los cazadores han realizado el examen del cazador en otra comunidad autónoma, aunque no fueran a cazar allí, en concreto en Aragón.
El Gobierno de Aragón ha dispuesto que su examen del cazador sea por vía telemática, y que se pueda llevar a cabo desde casa y en el momento. De manera que ni siquiera hace falta saberse el temario, se puede contar con todo tipo de asistencia "para aprobarlo sin más".
"Una vez conseguida la aptitud en el examen del cazador aragonés, cualquier cazador puede pedir licencia en cualquier lugar de España, como están haciendo los castellanomanchegos", denuncian.
En el momento actual --recalcan dichas organizaciones ecologistas-- no se sabe cuántas licencias se hayan podido dar con este método "fraudulento" y se está a la espera de saber qué pasará con las licencias ya emitidas, ya que, "en buena lógica", debieran de ser "anuladas".
Ecologistas en Acción y la SAO se han dirigido ya a la Consejería de Desarrollo Sostenible "para que ponga fin definitivo a este fraude y anule todas las licencias concedidas este año que hayan utilizado esta vía".
Asimismo se va a enviar un escrito a la comunidad de Aragón para que cese "este sistema fraudulento de examen" que no fomenta otra cosa que los cazadores salgan al campo "con un déficit notorio de conocimientos respecto a la forma en que deben desarrollar una actividad tan peligrosa y dañosa como es la caza".
A su juicio, "Ya de por sí son escasos y poco prácticos los requisitos que se les exigen a los cazadores en Castilla-La Mancha o en cualquier otra comunidad, como para que además se validen pruebas de otras comunidades autónomas y que para pasarlas valga con tener a mano un buen amigo que te rellene las respuestas desde casa".