El Gobierno de Castilla-La Mancha, según ha asegurado su vicepresidente, José Luis Martínez Guijarro, estará "muy vigilante" a cómo evoluciona el 'caso Kitchen' y ha lamentado que, "una vez más", por culpa de María Dolores de Cospedal la imagen de la Comunidad Autónoma "se vea afectada".
"Vamos a estar muy vigilantes a cómo evoluciona este caso porque hay dos personas" implicadas como la expresidenta de la región María Dolores de Cospedal y su director general de Planificación, Andrés Gómez Gordo, "que, siendo alto cargo, manejaba fondos reservados de la Administración General del Estado, según apuntan las informaciones que vamos conociendo", ha dicho el vicepresidente autonómico.
Además, ha reiterado que el Gobierno regional va a ejercitar aquellas acciones que le puedan corresponder en defensa de los intereses de Castilla-La Mancha.
Así, ha criticado que mientras en la región "se aplicaban recortes feroces en los servicios públicos", Cospedal "estaba en otras maniobras de gestión de fondos reservados para otros objetivos a nivel nacional". "Ya lo decíamos algunos en aquella época, Cospedal tenía más la cabeza en Madrid que en Castilla-La Mancha".