La cerámica de Talavera ha vuelto a vestirse de luto este lunes por el fallecimiento del ceramista talaverano Dámaso Gómez González que, a los 93 años de edad, nos dejaba.
Gómez, pintor cerámico muy conocido apreciado en la ciudad que le vio nacer, comenzó su andadura en el taller de Juan Ruiz de Luna siendo muy niño.
Su trabajo en el bello arte de la decoración cerámica lo desarrolló junto a otros insignes pintores como Pablo Adeva Martín y Rafael García Bodas en ‘Ruiz de Luna’, con quienes también coincidió ya jubilados en la confección de algunas piezas que formaron parte del mural que preside el Centro de Convenciones de Orán, en Argelia, el 2010 y que comandó Cerámica Artística San Ginés, con Mónica García del Pino al frente, la cual tuvo el orgullo de reunir a estos elogiables ceramistas, imagen que acompaña a este texto.
Dámaso Gómez dejó la cerámica y la fábrica Ruiz de Luna –donde había conocido a su esposa Amparo Muñoz ya fallecida– en el momento en que decayó el negocio del arte del barro y pasó a trabajar en el departamento de la Cooperativa Creta, donde se granjeó multitud de amistades que sumó a las que ya conservaba de su época como pintor.
Muchos talaveranos quizá lo recuerden, precisamente, de su paso por Creta y desconocían su faceta artística aunque él nunca abandonó la pintura con un taller en la localidad de Oropesa.
Desde las páginas de La Voz del Tajo, medio al que siempre tuvo una consideración más que notable, nos unimos al dolor de su familia y al de toda la ciudad por el fallecimiento del que puede ser uno de los últimos integrantes del mítico Taller Ruiz de Luna. Descanse en paz.