Más de 500 castellanomanchegos han puesto a disposición del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (SESCAM) sus impresoras 3D con el fin de imprimir material sanitario para que los profesionales del sector hagan frente al coronavirus y los pacientes se puedan beneficiar de sus fabricaciones.
Estos castellanomanchegos forman parte de una comunidad a nivel nacional llamada 'Makers', en la que una serie de personas se están coordinando con el fin de imprimir material sanitario para luchar contra el COVID-19.
En el caso de la provincia de Toledo, el coordinador del grupo es Roberto Casasola, un estudiante de Telecomunicaciones de la Universidad Politécnica de Madrid de 21 años de edad y natural de la localidad toledana de La Puebla de Montalbán.
En declaraciones a Europa Press, Casasola ha concretado que gestiona las áreas sanitarias de Toledo y Talavera de la Reina para la impresión de este material sanitario, que están llevando a cabo 200 personas mediante la impresión de viseras que protegen al personal y quien las use toda la cara.
SON REUTILIZABLES
"Lo más importante es que son reutilizables, se pueden desinfectar y volverse a usar", ha indicado, para explicar que para la elaboración de este material, además de la pieza que se crea en 3D, se usa una lámina de PVC que se encuentra fácilmente en papelería y resiste los métodos de desinfección, y una goma para ajustar a la cabeza.
"Estamos imprimiendo desde el sábado, que se aprobó un modelo en Castilla-La Macha por parte del Sescam que, junto con Protección Civil y los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, se coordina para hacer llegar el material a los hospitales tras acudir a los puntos de recogida habilitados", indica Casasola.
Sólo en la provincia de Toledo se han impreso ya desde el sábado pasado 927 viseras lo que quiere decir, según este estudiante de ingeniería toledano, que la gente se está volcando en este proyecto, tanto en lo que se refiere a impresoras como al material pues hay empresas que han donado gomas, láminas de PVC y el filamento que usan las impresoras 3D.
También ha destacado Casasola que hay empresas que han puesto a disposición de las personas que están imprimiendo este material sanitario almacenes por si se tuviera que almacenarse el producto en un momento dado.
En cuanto al proceso de elaboración, ha concretado que en el grupo de Telegram por el que se comunican se dan una serie de instrucciones, los archivos que hay que hay que imprimir y el material que se precisa para hacer las viseras. "Se rellena un formulario con lo que puedes donar y a partir de ahí se pone en manos del Sescam, que manda gente para recogerlos".
RESPIRADORES
Además de las viseras, esta comunidad se está preparando para imprimir diferentes elementos para los respiradores, ya que se está llevando a cabo el proyecto con expertos sanitarios en la materia y una vez que se apruebe por parte de la Consejería de Sanidad se procedería a imprimir este tipo de material.
El sistema en concreto se basa en un conjunto de levas accionado por un motor paso a paso que presiona una balona, la cual insufla el aire al paciente, ha indicado de su lado el ingeniero toledano Jorge Merino Domínguez, que añade que el motor se controla mediante un sistema programable llamado Arduino.
Otros de los elementos sanitarios que tiene en mente imprimir esta comunidad, continúa Casasola, son mascarillas, aunque necesitan un material distinto que no sea poroso como el filamento que comúnmente se usa en la impresión 3D. "Es un material muy caro y difícil de conseguir, por eso se están haciendo viseras en lugar de mascarillas".
Finalmente, Casasola ha hecho un llamamiento a todo el mundo que quiera colaborar en este proyecto, tenga o no impresoras 3D, ya que también se puede donar material para su elaboración. "Es aquí, en estos momentos difíciles, donde se demuestra que todos estamos juntos", ha concluido.