El PSOE de Castilla-La Mancha ha defendido este lunes los presupuestos regionales del 2017 como los de "la recuperación social y económica de Castilla-La Mancha", al tiempo que ha lamentado la oposición generadora de inseguridades que hace el PP.
Así se ha referido en rueda de prensa la diputada nacional del PSOE Esther Padilla a las explicaciones que ha pedido al presidente regional, Emiliano García-Page, la parlamentaria del PP Rosa Romero por las "irregularidades" detectadas por el Tribunal de Cuentas en los presupuesto regionales de 2017.
Del mismo modo, a preguntas de los medios, se ha referido Padilla a las palabras de Romero sobre que el PP estudiará ir a los tribunales, para señalar que si el Tribunal de Cuentas detecta irregularidades va a la Fiscalía directamente.
"Lo que está claro es que los presupuestos del 2017 fueron los de la recuperación social y económica de Castilla-La Mancha después del Gobierno regional del PP de Cospedal, aplaudido por Paco Núñez", ha manifestado la diputada socialista.
MESA DEL AGUA
Precisamente, durante su rueda de prensa, Padilla se ha referido al presidente de los 'populares' castellanomanchegos para apuntar que se vaya a sentar en la Mesa del Agua de este viernes con gente a la que "no deja de insultar".
"Núñez ha demostrado que no tiene voz propia ni capacidad. O cambia mucho de aquí al viernes o consideramos que más que un aliado vamos a tener a un espía de la región de Murcia o del PP de Casado", ha reiterado Padilla, que le ha vuelto a pedir que dé un paso al frente y defienda "de una vez por todas" los intereses de la región.
EL PP PIDE EXPLICACIONES
El PP ha pedido al presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, explicaciones por las "graves irregularidades" en los presupuestos de la Comunidad Autónoma para 2017, recogidas por el Tribunal de Cuentas, por lo que ha calificado como "un desastre" la gestión del jefe del Ejecutivo autonómico.
En rueda de prensa, la diputada nacional del PP Rosa Romero ha indicado que las conclusiones de este informe son "lo más grave" que ha visto en un informe de fiscalización elaborado por el Tribunal de Cuentas, con irregularidades en la rendición de cuentas, "graves deficiencias" y "tirones de orejas".
Como ejemplos concretos, Romero ha señalado que en el informe se habla de acciones respecto a adquisiciones, servicios o prestaciones aprobadas por el Consejo de Gobierno que ascienden hasta a ocho millones de euros y que están sin fiscalizar.
66 MILLONES PENDIENTES
Del mismo modo, ha apuntado que el Tribunal de Cuentas señala que al inicio del ejercicio 2017 había casi 66 millones de euros pendientes de cobro hacia acreedores y que cuando terminó el ejercicio se elevaron en 28 millones de euros más, hasta los casi 100 millones de euros.
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