En la mañana del día 16 de noviembre medio centenar de jareños de más de 12 poblaciones recorrieron la segunda etapa del Camino de Guadalupe de los Montes de Toledo, que transcurre por la Comarca de la Jara. En esta ocasión, el punto de inicio fue junto al Consistorio Local de Espinoso del Rey, lugar desde el que se ha reclamado a los diferentes partidos políticos, que pongan el foco en hacer una inversión sobre la carretera CM-4171, en el tramo entre Buenasbodas y los Navalmorales.
El camino ha transcurrido por valles y montes repletos de jaras, pinos, robles, encinas, también madroños y alguna especie única de cornicabra. Esta parte de la Jara Alta, claramente actúa como un pulmón natural, absorbiendo emisiones de CO2 y contribuyendo al freno del cambio climático.
Al llegar a Robledo del Mazo, la escuela del pueblo se convirtió en un salón comedor donde los asistentes disfrutaron de la comida que preparó el bar restaurante Las Lanchas. El sacerdote también se acercó a dar su bendición y aunque no todos los participantes viven este camino de un modo religioso, compartieron este momento desde el total y absoluto respeto que caracteriza al pueblo jareño.
Posteriormente Yolanda Martínez Urbina, presidenta de Impulso a la Jara, animó a los participantes a continuar apoyando esta acción saludable, lúdica y social que promueve Impulso a la Jara para dar visibilidad al potencial de nuestro territorio, y que supone una herramienta de diversificación de la actividad económica y social para la Jara.
También defendió que con la riqueza patrimonial y medioambiental de la Jara y una gestión eficiente y coordinada de los recursos, la Comarca puede y debe convertirse en una potencia en el ámbito del senderismo a través de las diferentes vías de Peregrinación a Guadalupe y de otros muchos caminos que unen a sus diferentes pueblos. El impulso a esta actividad económica supone también una estrategia para la cohesión territorial, la fijación de población y la conservación del medioambiente.