El presidente del Gobierno regional, Emiliano García-Page, ha destacado la “importantísima oportunidad” que “ha sabido aprovechar Toledo” y para toda la región con la puesta en marcha del espacio museístico ‘Colección Roberto Polo. Centro de Arte Moderno y Contemporáneo’ (CORPO) que este miércoles ha abierto sus puertas en la capital regional.
El presidente del Ejecutivo autonómico ha asegurado que este nuevo espacio va a convertirse en el “más importante en su especialidad de España” y en uno de los más destacados de toda Europa; un centro “referente” en la “valorización cultural” de la época de la Historia del Arte en la que se centra y que abarca desde principios del siglo XX hasta nuestros días.
Tal y como ha destacado García-Page “esta ciudad no sólo asume de buen grado los cambios y los hace permanentes” sino que “las generaciones de hoy no nos podemos permitir el lujo de saltar el solapamiento de esta época” artística que, ha reconocido, “en muchos sitios no ha tenido acogida” y con la que “teníamos una deuda”.
“Hay pocas ciudades que acumulen una permanente intuición cultural” como Toledo, ha hecho hincapié el presidente regional quien ha destacado el carácter destacado de la capital regional como “esponja” de la cultura.
El presidente de Castilla-La Mancha también ha expresado su deseo de que la segunda fase del CORPO, en la ciudad de Cuenca, pueda llegar a ser una realidad; un objetivo “irrenunciable”, ha subrayado tanto “para el artista, el coleccionista y la comunidad autónoma”.
“Espero que el éxito abra también algunas mentalidades y facilidades en Cuenca”, ha subrayado García-Page, quien también ha destacado que “este éxito debe ser una realidad” en una ciudad como Toledo que lleva 2.000 años “viendo que pasan cosas importantes”.
En este sentido, el presidente regional ha apostado por seguir fomentando la industria cultural en la región y en España para “intentar igualarse con Europa” y que ésta genere cada vez más empleo y riqueza.
Por su parte, el consejero de Educación, Cultura y Deportes, Ángel Felpeto, ha destacado en su intervención que sin duda “Toledo es el mejor, quizá un lugar único donde es posible ese diálogo entre el pasado de este espacio de Santa Fe y una nueva visión de la evolución del arte actual a partir de una cuidada selección de obras que muestran algunos de los cambios utilizados para llegar a la modernidad, hasta ahora no representados en ninguna otra colección o museos de nuestro país”, y ha añadido que “tampoco tiene duda de que lo mismo ocurrirá en Cuenca”.
Felpeto se ha referido asimismo al Plan Director del Museo de Santa Cruz en el que está incluido el espacio de Santa Fe y la colección Roberto Polo, espacios que “en estos días conectaremos físicamente a través de la exposición temporal de Werners Manners” para que “quienes visiten la colección accedan directamente también a la exposición permanente de Santa Cruz y toda su obra y el espacio Santa Fe y el arte contemporáneo”.
Al acto de apertura pública de la Colección Roberto Polo. Museo de Arte Moderno y Contemporáneo de Castilla-La Mancha han asistido más de 500 invitados. Entre ellos, también han participado, el propio coleccionista e historiador Roberto Polo; el presidente de la Cortes regionales, Jesús Fernández Vaquero; el consejero de Educación, Cultura y Deportes, Ángel Felpeto; la consejera de Fomento, Agustina García Élez; el presidente de la Diputación de Toledo, Álvaro Gutiérrez; y el portavoz del Gobierno regional, Nacho Hernando, además de la alcaldesa de la capital regional, Milagros Tolón.
La institución, regida por la Fundación ‘Colección Roberto Polo’, contiene parte de la muestra permanente de Polo en Castilla-La Mancha, formada por 250 obras de arte moderno y contemporáneo, incluyendo las vanguardias históricas, las llamadas vanguardias periféricas, los realismos de nuevo cuño y un último apartado dedicado al período comprendido entre la década de 1990 y lo que llevamos del siglo XXI.
Las vanguardias históricas están representadas por pinturas, esculturas, montajes y fotografías de los artistas más reconocidos de las primeras décadas del XX. Hay obra de precursores como Paul Joostens, Erik Heckel y Karl Schmidt-Rottluff, fundadores del grupo seminal Die Brücke, Georges Vantongerloo, que atestigua una presencia belga en el seno del movimiento holandés De Stijl, Victor Servranckx o Marthe Donas, una pionera de la vanguardia europea, ligada a la galería Der Sturm y su influyente revista. A ellos hay que añadir El Lissitzky, Gustav Klucis, Heinrich Campendonck, Henri-Edmond Cross, Jozef Peeters, Karel Maes, Karl Hofer, Kurt Schwitters, Ilia Chasnik, Laszlo Moholy-Nagy, Man Ray, Max Ernst u Oskar Schlemmer.
Integran el segundo bloque figuras representativas de las llamadas “vanguardias periféricas”, desarrolladas lejos de los grandes centros de vanguardia (Bruselas, París, Milán, Berlín, Dresde, Viena o Moscú) tanto en Europa como en América: Estados Unidos, Gran Bretaña, Holanda, República Checa, Eslovaquia y Polonia. Son Arno Breker, Darío Suro, Edmond Van Dooren, Edmund Kesting, Eduard Bick, Emiel Poetou, Erik Krantz, Franz Wilhel Seiwert, Georges Lacombe, Georges Tesson, Gustav Miklos, George Kolbe, Gustav Wunderwald, Jacques-Henry Lartigue, Jos Léonard, Jules Schmalzigaug, Karl Hermann Haupt, Léon Kelly, Maurice Xhrouet, Marc Eemans, Marcel Lempereur-Haut, Marcel Louis Baugniet, Pierre-Louis Flouquet, Prosper de Troyer, Reimond Kimpe, Robert Michel, Roger Van Gindertael, Vasili Dimitrovic Ermilov, Victor Servranckx, William Degouve de Nunques, William Wauer o Xavier Mellery.
A continuación hay obras que se encuadran en los realismos de nuevo cuño (neorrealismo, novecento, realismo mágico, neocubismo, neoexpresionismo, figuración lírica, nueva objetividad, precisionismo), hegemónicos en el período de entreguerras, así como obras surrealistas, pero sobre todo abstractas: informalistas, constructivistas, neoplásticas, maquinistas o incluso herederas del expresionismo y el futurismo.
El último apartado abarca la década de 1990 y lo que llevamos del siglo XXI: Werner Mannaers, Walter Darby Bannard, Thomas Downing, Howard Mehring, Ed Moses, Martin Kline, Paul Manes, Karen Gunderson, Lois Lane, Leo Copers, Carl De Keyzer, Joris Ghekiere, Karin Hanssen, Annabelle Hyvrier, Jaroslaw Kozlowski, Marc Maet, Sadie-Murdoch, Xavier Noiret-Thomé, Maria Roosen, Andrew Tift y Jan Vanriet.
El CORPO incluye asimismo una escultura de Juan Garaizábal y las cesiones temporales de una pintura de Rafael Canogar y dos piezas de Miquel Navarro.
Junto al propio CORPO y la colección permanente, este miércoles también ha abierto sus puertas la primera de las exposiciones temporales que acogerá en lo sucesivo el nuevo centro museográfico; una muestra del artista belga Werner Mannaers en la que combina la pintura con extractos, citas filosóficas y referencias a artistas destacados del siglo XX.
Entre sus proyectos destaca la publicación del libro “Love Letters”, pinturas hechas por el artista a lo largo de los años, cartas de amor destinadas a Natacha, su musa, y realizadas con gouache sobre papel. Cada una de las piezas remite, como es habitual en Mannaers, a otros creadores, entre ellos Picasso y Miró, por los que siente una especial veneración.
Esta primera muestra del CORPO cuenta con alrededor de 60 lienzos de gran formato y 135 dibujos.