Talavera tiene, desde ayer, un Hijo Predilecto más, Julio Mayo, a sus casi noventa años, tiene otro reconocimiento oficial, que se suma al Premio Ciudad de Talavera que ostenta desde 2011. Si importante es su labor artística, con sus cuadros diseminados por los cuatro puntos cardinales del planeta, no lo es menos su labor docente, porque por su escuela han pasado multitud de talaveranos de todas las edades a los que ha impregnado su amor por el arte, en general, y por la pintura, en particular.
En el Pleno Extraordinario en el que se nombró hoy Hijo Predilecto de Talavera de la Reina, que tuvo lugar en el Teatro Victoria, el alcalde trasladó al homenajeado en nombre de toda la Corporación Municipal “nuestras más sinceras felicitaciones por este nombramiento, con el que Talavera distingue a talaveranos ilustres, y en señal de gratitud por sus valores profesionales y humanos”.
Julio Mayo se ha caracterizado por pintar siempre del natural, a pie de calle, en contacto con el público, habituado a compartir con sus vecinos el progreso de cada cuadro. Una de sus obras más emblemáticas por su originalidad y envergadura es la Batalla de Talavera, un cuadro que representa un momento histórico de Talavera en la Guerra de la Independencia y que se encuentra expuesto en la entrada principal del Ayuntamiento talaverano.