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El comisario y el subdelegado analizan el alijo que se expuso para los medios en dependencias policiales. (Foto: J.F.) |
Desarticulada una red organizada que distribuía droga por Talavera y comarca que llegaba desde Bolivia
La Policía Nacional ha detenido a siete personas dentro de la Operación Pony en la que se han intervenido efectos como droga, 15.655 euros, armas y joyas.
miércoles 23 de abril de 2014, 10:51h
La Policía Nacional de Talavera ha desarticulado un grupo articulado que se dedicaba a la introducción y posterior distribución de droga en Talavera, comarca, incluso hasta Portugal, procedente de paquetes que traían desde Sudámerica. La investigación, denominada 'Operación Pony', se ha saldado con la detención de siete personas de las que seis están cumpliendo prisión. A estos individuos se les culpa de delitos de tráfico de drogas, robo con fuerza y tenencia ilícita de armas, además de ser partícipes en otra serie de delitos, según explicó el subdelegado del Gobierno en Toledo, Javier Corrochano, quien aprovechó para felicitar al comisario José Jiménez Yáñez por la labor realizada por la Brigada Local de la Polícia Judicial, concretamente el grupo UDYCO (Unidad de Droga y Crimen Organizado).
La red desarticulada estaba compuesta por F.L.V., F.L.M., J.F.N.P. y E.J.R.I., los dos primeros españoles, el tercero portugués y el cuarto francés, aunque todos ellos vecinos de Talavera, F.M.A. y B.L.S.U., español y colombiana, ambos vecinos de San Román de los Montes, y D.G.C., español con domicilio en Navamorcuende. Los detenidos, cinco de ellos con antecedentes penales, tienen edades comprendidas entre los 25 y los 48 años.
La investigación comenzó hace cuatro meses al detectar las autoridades policiales un grupo que podía estar dedicándose al tráfico de estupefacientes. En las indagaciones se comprobó que había dos máximos responsables, uno español y otro portugués, con contactos en Sudamérica, que se encargaban de recepcionar la droga, transformarla con sustancias de corte y luego distribuirla. En la operación se procedió a un primer registro domiciliario hallándose una tableta de 1.958 gramos de cocaína de gran pureza, que transformado daría lugar a unos seis kilos de coca. A raíz de la primera investigación se extrajo que en la red operaban otras cinco personas, una de ellas de Bolivia, que era la que trasladaba la droga a España. Entre los efectos ocupados se comprobó que había varias armas, incluido un rifle que procedía de un robo con fuerza cometido en Ocaña. Javier Corrochano avanzó que con la Operación Pony no se cierra este capítulo, ya que se sigue investigando sobre la procedencia de las armas, por si proceden de otro hecho delictivo, o la procedencia de las joyas y el cuadro intervenidos, por que puede tratarse de objetos robados.
El subdelegado resaltó la peligrosidad del grupo dado el número de armas requisadas, además de haberse extraído de los antecedentes que “son personas que se dedicaban profesionalmente a este delito y lo llevaban a cabo desde hace bastante tiempo”. La detención se inició el el viernes 4 de noviembre y concluyó el martes 8, día en que se levantó el secreto de sumario.
Alijo intervenido
Entre los efectos intervenidos en los seis registros domiciliarios puede detallarse el siguiente alijo: 1.484 gramos de cocaína, 2 gramos de heroína, 60 gramos de hachís, 20 gramos de marihuana, sustancia de corte, útiles para la manipulación de la sustancia, tres vehículos, tres ordenadores portátiles, un ordenador de mes, teléfonos y tarjetas de móvil, 15.655 euros en metálico, pistola de calibre 9mm Parabellum, rifle calibre 22, rifle calibre 30 (sustraído en Ocaña), escopeta de calibre 12, diversa munición, numerosas joyas y un cuadro.