A pesar de que la portavoz del PP, María Rodríguez, afirmó públicamente, en rueda de prensa a finales del pasado mes de diciembre que el 1 de febrero comenzaría a trabajar Monbús, la nueva empresa adjudicataria del servicio de transporte urbano en sustitución de
la empresa talaverana Eborabus, lo cierto es que a fecha de hoy ni tan siquiera está firmado el contrato, y se desconoce el momento en que se producirá el traspaso, que posiblemente se alargue dos meses.
La empresa talaverana anunciaba que agotará todos los medios legales a su alcance ante la decisión de adjudicación del servicios urbanos, por lo que interpondrá un recurso al Contencioso Administrativo ante el Tribunal Superior de Justicia de Castilla-la Mancha (TSJCLM) una vez se realice el traslado del servicio, que deberá ser tras la resolución del recurso inicial ante el Ayuntamiento.