El 77% de los padres afirma relajar las normas sobre los menores durante las vacaciones, frente al 23% que señala que, aunque estén fuera de casa, no es motivo para descuidar las normas y “convertirse en salvajes”
En las vacaciones de verano, los padres suelen 'relajar' las normas impuestas a sus hijos durante el resto del año. Un estudio realizado por Jetcost sobre las vacaciones en familia y lo que han permito hacer a sus hijos ha revelado estos datos.
El 77% de los padres afirma relajar las normas sobre los menores durante las vacaciones, frente al 23% que señala que, aunque estén fuera de casa, no es motivo para descuidar las normas y “convertirse en salvajes”. Las razones dadas por los tutores sobre la bajada de las normas en esta época son que los niños se “merecen disfrutar un poco más de la vida” y que, al estar de vacaciones, los padres no quieren controlar a sus hijos a todas horas.
NORMAS QUE NO SE CUMPLEN
Al profundizar sobre el tema, se les preguntó qué normal no cumplían sus hijos durante las vacaciones. Las respuestas más comunes fueron trasnochar -90%-, jugar con desconocidos -67%-, comer sin horario y lo que desean -56%-, y beber bebidas alcohólicas -35%-. Ante esta última norma, Jetcost pidió que dijeran qué edad consideraban adecuada para comenzar a consumir este tipo de bebidas, siendo la edad media promedio de 10 años.
Las más 'toleradas' son las alcopops -pequeñas botellas con refresco y alcohol fuerte- con 35%, la sangría o tinto de verano en un 30% y la cerveza, con un 27%. Tan solo el 3% de los encuestados admitió dejar beber a su hijo algo más 'fuerte', como pueden ser las copas. Casi la totalidad de los padres reconoce que “por una vez que lo beban no pasa nada”.