El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, y el secretario general de Podemos en la región, José García Molina, han puesto punto y final a la crisis institucional surgida tras el fracaso del último Proyecto de Ley de Presupuestos regionales el pasado mes de abril acordando renovar el pacto de investidura que otorgó al PSOE el Gobierno --roto unilateralmente por Podemos hace 10 meses, pactando unos nuevos presupuestos para este año y para el próximo ejercicio y ofreciendo dar entrada al Ejecutivo a la formación en forma de dos puestos en el Consejo de Gobierno, entre ellos una Vicepresidencia.
Así lo han puesto de manifiesto ambos dirigentes en una rueda de prensa conjunta tras una reunión de más de tres horas en el Palacio de Fuensalida, donde ambos se han mostrado de acuerdo en "mirar hacia el futuro" a partir de ahora.
García-Page ha considerado que, tras la "papeleta" vivida en las últimas semanas, la solución no podía pasar por "un acuerdo coyuntural", lo cual le ha llevado a la decisión de "ofrecer a Podemos que se incorpore a las responsabilidades de Gobierno".
Según el presidente autonómico, dando entrada en el Ejecutivo a la formación morada pretende que "las cosas prioritarias" para Podemos sobre las que hayan tenido "dudas" en cuanto a la gestión "puedan salir adelante" con algún miembro del partido de García Molina en la toma de decisiones.
En todo caso, ha querido dejar claro que no habría habido acuerdo en este aspecto si antes no se hubiera alcanzado el pacto presupuestario.
Y, otro acuerdo más, el acuerdo de investidura "queda renovado". "Hemos acordado las políticas, ahora queremos su participación en un proyecto que tiene que ser conjunto", ha dicho Page.
GARCÍA MOLINA SUPEDITA LA ENTRADA A LA DECISIÓN DE LA MILITANCIA
El líder de Podemos, José García Molina, ha manifestado en todo caso que la decisión de entrar en el Gobierno se someterá a la militancia, y en breves fechas se pondrá en marcha un proceso participativo para que sean los inscritos los que decidan.
Ha dicho además que en los dos años de legislatura ha habido "luces y sombras", subrayando que "lo importante es no quedarse enredados en lo que pasó, sino en lo que tiene que pasar" y ver qué extremos se pueden unir en el futuro.
Sobre la entrada en el Gobierno, ha indicado que la región "merece esas garantías y esa confianza" de que a partir de ahora habrá "una estabilidad que se tiene que traducir en medidas concretas que signifiquen que los acuerdos se van a cumplir desde la lógica".