El
Gobierno de Castilla-La Mancha está consiguiendo importantes avances en su objetivo de garantizar la equidad en el acceso a las prestaciones de reproducción humana asistida por parte de aquellos ciudadanos que lo necesiten, gracias al desarrollo de una completa estrategia que está permitiendo homogeneizar las actividades que, en este sentido, se realizan en todos los hospitales de la Comunidad Autónoma.
El pasado 1 de enero entraron en vigor las instrucciones sobre requisitos, indicaciones, acceso, criterios de aplicación y procedimientos ofertados en este ámbito en el Servicio de Salud de Castilla-La Mancha. Un documento elaborado con la colaboración de un grupo de expertos en la materia, y consensuado desde el punto de vista clínico y asistencial con todos los servicios médicos de la región implicados, habiendo recibido aportaciones de todos los servicios de Obstetricia y Ginecología del conjunto de la región.
Estas instrucciones son, según el director general de Asistencia Sanitaria del SESCAM, José Antonio Ballesteros, “la puerta visible de una verdadera estrategia en reproducción humana asistida elaborada desde el Gobierno de Castilla-La Mancha con el fin de homogeneizar las prestaciones realizadas en todos nuestros hospitales y con ello garantizar la equidad de acceso a estas por parte de toda la ciudadanía de la región.
En una primera fase se han estructurado de forma homogénea las prestaciones a realizar en todos los hospitales de la región. Así, actualmente el estudio de esterilidad, es decir, la primera fase de la terapia en reproducción humana asistida, se está realizando ya en los 14 hospitales de la red pública regional que tienen operativa la cartera de servicios comunes en el Sistema Nacional de Salud, determinada por el Real Decreto 1030/2006 y la Ley 14/2006 que regula las técnicas de reproducción humana asistida.
De igual manera, son ya ocho los hospitales que también realizan la inseminación artificial con semen de pareja, en concreto los 7 que ya la venían realizando --Albacete, Villarrobledo, Puertollano, Cuenca, Guadalajara, Toledo y Talavera de la Reina--, a los que recientemente se ha sumado el de Almansa. Además, de forma inminente lo hará el Hospital General Universitario de Ciudad Real.
Por otra parte, el Servicio de Salud de Castilla-La Mancha está analizando en qué hospitales debe realizarse el proceso de inseminación con semen de donante. Igualmente, dentro de esta estrategia regional se han analizado las dos Unidades de Reproducción Humana Asistida que actualmente realizan fecundación in vitro en la región, ubicadas en los hospitales de Albacete y Toledo.
Paralelamente, y en la línea de facilitar el acceso a esta prestación, el SESCAM ha rescindido todos los convenios con las clínicas ubicadas fuera de la región con las que tenía conciertos, priorizando la oferta con aquellas conveniadas en la propia Comunidad Autónoma.
Además de regular y homogeneizar de forma absolutamente protocolizada todas las prestaciones incluidas en la mencionada Ley 14/2006, las instrucciones elaboradas por el Servicio de Salud de Castilla-La Macha introducen una importante mejora, como es el hecho de que las mujeres solas o con pareja femenina que lo soliciten tienen derecho a acceder a esta prestación.
Todo ello en consonancia con dos de los pilares fundamentales que regulan la política sanitaria del Gobierno de Castilla-La Mancha, como son la sostenibilidad y, sobre todo, la humanización. De esta manera, desde el pasado 1 de enero todas las mujeres que cumplan los requisitos fijados por la legislación en vigor, así como los criterios clínicos establecidos por la sociedades científicas, pueden acceder en igualdad de condiciones a las terapias de reproducción asistida en el ámbito del SESCAM.
El desarrollo de esta estrategia ya se está viendo reflejado en los resultados que se están obteniendo tras la entrada en vigor al inicio de este año de las mencionadas instrucciones. Así, en los cinco primeros meses de este año, las solicitudes de acceso a técnicas de reproducción humana en el sistema sanitario público de Castilla-La Mancha se han incrementado un 35 por ciento con respecto al mismo periodo del año 2015.