María Dolores de Cospedal ha sido proclamada este sábado presidenta regional del PP de Castilla-La Mancha, con el 95,43 por ciento de los votos de los 934 compromisarios asistentes al XIII Congreso Regional del PP.
El alcalde de Cuenca y presidente de la Mesa del Congreso, Ángel Mariscal, ha dado a conocer a las 19.38 horas el resultado de la votación. Se han emitido 698 votos, de los que 696 eran válidos --había dos nulos--, 27 votos en blanco y 669 a favor.
Cospedal, que en el congreso de 2012 salió elegida con el 98,8 por ciento de los votos, ha tomado la palabra a continuación para dar las gracias a los presentes y a los invitados, entre los que figuraban el presidente de la Confederación de Empresarios de Castilla-La Mancha (Cecam), Ángel Nicolás; el responsable nacional de Asaja, Pedro Barato, y representantes de Satse, Csif, ONCE, Del mundo gitano, agrario y social de la región.
"Todos los apoyos han sido muy importantes", pero también todos los alientos de estos once años y de estas últimas semanas", ha reconocido Cospedal, que ha agradecido el cariño y cercanía de todos los cargos del partido a todos los niveles, y su experiencia, ya que sin su fuerza no podría estar donde está.
Ha incidido en la idea de trabajar desde abajo a arriba de cara a las próximas elecciones --"el proyecto tiene que ser más importante que las personas", ha recalcado--, convencida de que los jóvenes tienen que participar en el proyecto de futuro.
Cospedal ha pedido a los presentes, con independencia de su edad, que sean capaces de enfrentarse con todos los argumentos a aquellos que dicen "que ya está todo hecho" y que "aquí no se puede ir más allá", pues está segura de que volverán a ganar el Gobierno de Castilla-La Mancha. "Ha comenzado la cuenta atrás, pero ahora a trabajar con ganas y con ilusión".
Asimismo, con un recuerdo para sus padres, presentes en el auditorio junto a su marido, Ignacio López del Hierro, ha tenido palabras de agradecimiento para todas las personas que la acompañan en la candidatura, y especialmente para el presidente del Gobierno de España, Mariano Rajoy.
"Es un orgullo poder tener un presidente que tiene experiencia, pero también el vigor y las ganas de la juventud, luchar por las cosas importantes y no entretenerse en tonterías y que tiene como prioridad no ser el más simpático en una tertulia de la tele o salir en sitios ocurrentes sino trabajar por España", ha concluido.