El PSOE de Castilla-La Mancha ha explicado este miércoles, ante la denuncia del equipo de Pedro Sánchez de que hay 200 personas en Albacete con problemas para afiliarse, que un día antes del Comité Federal del 1 de octubre se entregaron en Ferraz 180 solicitudes con errores, "sin las oportunas garantías".
Los socialistas han reaccionado así a la carta que ha enviado el equipo del precandidato a la gestora para pedirle una reunión con el fin de hablar del censo y de este tipo de problemas que encuentran algunas personas para afiliarse al partido y poder participar en el proceso de primarias a la Secretaría General.
En un comunicado, el PSOE “ha querido dejar hoy claro que los que ahora están cuestionando la paralización de algunas afiliaciones”, no explican los motivos de que “180 de las mismas aparecieron en un cajón en la sede nacional de Ferraz sin las oportunas garantías y certificaciones, tal y como está establecido en las normas internas del partido”.
Afiliaciones, prosigue el comunicado, que se entregaron curiosamente en Ferraz el día 30 de septiembre del pasado año, un día antes de la celebración del Comité Federal, en el que el anterior secretario general, Pedro Sánchez, dimitió tras perder la confianza de la mayoría de los miembros de este órgano.
La Comisión Gestora que se formó tras la citada dimisión encontró que de ese paquete de 180 nuevas afiliaciones, 151 habían sido tramitadas de forma irregular o presentaban errores, por lo que decidió su suspensión. Entre los errores detectados estaban que solo figuraban nombres sin firmas (no todos legibles) o que no había direcciones a efectos de notificaciones, etc.
La Gestora también, con el ánimo de que se corrigieran los errores detectados en estas afiliaciones, lo comunicó a la dirección provincial del partido en Albacete. Sin embargo la dirección provincial no trasladó este problema a las agrupaciones locales afectadas para que pudiera ser resuelto.
Desde el PSOE de Castilla-La Mancha entienden que entre las obligaciones de la dirección del partido están no solo garantizar los derechos de participación de los militantes sino también la de velar porque esa participación se produzca de acuerdo con las normas y procedimientos que tenemos regulados en nuestras normativas, normas que han sido aprobadas en procesos absolutamente democráticos.