La Asociación Castellano Manchega de Familias Numerosas Acamafan, denuncia que la Junta continúe retrasándose en el pago de las ayudas habiendo comunicado en varias ocasiones, durante las últimas semanas, que ya se hacía efectivo. Así lo han comunicado en nota de prensa.
Las familias desesperadas, aseguran "no dejan de contactar con la Asociación ya que, en los servicios periféricos, no cogen los teléfonos". Esta situación es normal porque las Familias enfadadas se enfrentan con los funcionarios y éstos no tienen ninguna culpa, pero son los que cogen el teléfono. Estas familias llevan procesionando desde el 20 de diciembre diariamente al banco a consultar sus cuentas y comprobar si han cobrado.
RETRASOS EN LA RENOVACIÖN DEL TÍTULO. Además en los últimos meses también se han producido retrasos en las renovaciones de los títulos lo que conlleva que familias que tienen hijos estudiando en la Universidad, tengan que abonar los billetes del transporte interurbano íntegro, no teniendo derecho al descuento del 20/50% que estipula la Ley de Protección a las Familias Numerosas.
PÉRDIDA DE DERECHOS. No mejora el trato que este colectivo recibe por parte del gobierno regional, más bien empeora. Desde que Cospedal llegara al Gobierno de Castilla la Mancha sufren un declive importante, ya hace tres años la asociación elaboró un informe de los derechos que estas familias estaban perdiendo, desgraciadamente con el gobierno actual no solo no ha mejorado nada sino que van empeorando diversos trámites.
Con la última modificación de la Ley de Familias Numerosas en 2015 se mantenía el título hasta que el pequeño de los hijos dejase de cumplir los requisitos, "pues bien, a las familias que les caduca el Título, la JCCM se permite el lujo de no renovarlo, saltándose la mencionada a la torera", asevera la Asociación.
Por último, afirman que es muy penoso, ver, cómo un país con la tasa de natalidad de las más bajas del mundo no solo no cuida a las familias con muchos hijos, como hacen otros países de la UE sino que además les va quitando los pocos derechos que han ido consiguiendo con mucho esfuerzo y trabajo las asociaciones, en los últimos años.