El Consejo de Ministros aprobará este viernes un nuevo gravamen sobre los productos con alto contenido en azúcar y un incremento fiscal sobre los impuestos especiales de tabaco y alcohol, según Cinco Días.
BEBIDAS AZUCARADAS
El impuesto que gravará las bebidas con alto contenido en azúcar afectará especialmente al sector de los refrescos. Se trata de una medida que otros países como el Reino Unido ya han aplicado y que se justifica por motivos de salud y para reducir el consumo de azúcar.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) publicó recientemente un informe que recomendaba gravar con más tasas las bebidas azucaradas para reducir los problemas de obesidad, la diabetes de tipo 2 y la caries. En el mismo sentido, el Ejecutivo también pretende subir el impuesto al tabaco y el que grava el alcohol, mientras que finalmente no se tocará el impuesto de los carburantes.
ALCHOL Y TABACO
El decreto también contemplará una subida de los impuestos especiales que gravan el alcohol y el tabaco. La medida no afectará a la cerveza, que cuenta con un impuesto particular, ni al vino, que seguirá con un tipo del 0% como hasta ahora. La subida al alcohol se limitará a los destilados (whisky, ginebra o vodka, entre otros).
PAGO EFECTIVO 1.OOO EUROS
El Gobierno limitará a 1.000 euros los pagos en efectivo sin control de Hacienda. El Consejo de Ministros aprobará este viernes un conjunto de medidas para luchar contra el fraude fiscal y que en su mayoría estarán centradas en el IVA, cambios en Sociedades y Especiales y una tasa a las bebidas azucaradas, así como subir los impuestos especiales al alcohol y al tabaco, con las que espera recaudar 6.200 millones. La efectividad de esta medida es discutible, ya que aquellos con deseo de defraudar pueden fragmentar los pagos para evitar la supervisión.