La
Guardia Civil ha puesto a disposición judicial a tres personas por los delitos de falsificación de documentos, hurto y blanqueo de capitales. Uno de ellos también ha sido investigado por haber denunciado un robo con violencia e intimidación y un secuestro inexistentes.
La víctima, expareja de este último, fue una mujer de avanzada edad a la que consiguieron engañar para que extrajera de su cuenta bancaria mas de 56.000 euros y a la que también hurtaron numerosas joyas y otros objetos que luego vendieron en comercios de Toledo.
Según ha informado la Delegación del Gobierno en un comunicado, un hombre se puso en contacto el
Servicio 112 de Castilla-La Mancha el pasado mes de julio, informando de que se encontraba retenido contra su voluntad y maltratado por sus cuidadores en la localidad de El Casar de Escalona. Desde este Servicio se pasó aviso al teléfono 062, de urgencias de la Guardia Civil, que envió una patrulla de Santa Olalla al lugar.
La Guardia Civil realizó las gestiones necesarias para que esta persona fuera atendida por los servicios sanitarios, debido a su estado de salud y detuvo a ambos cuidadores para aclarar el supuesto secuestro.
Ante la gravedad de los hechos denunciados, la Guardia Civil de Torrijos realizó las comprobaciones necesarias para corroborar toda la información facilitada por la supuesta víctima y descubrió que el denunciante había convivido, durante varios años, con una anciana que, posteriormente, fue ingresada en una residencia de ancianos, mientras que él permanecía en el domicilio.
Éste, tras el ingreso de la anciana en la residencia de ancianos, contrató a un hombre y a una mujer para que le cuidaran, ya que empezaba a tener problemas de movilidad.
Desde ese momento, la supuesta víctima del secuestro, empezó a engañar a la anciana para que extrajera diversas cantidades de dinero de sus cuentas bancarias, que eran invertidas en la compra de vehículos que eran puestos a nombre de la cuidadora. También falsificó la firma de la anciana para vender el vehículo de esta última. En alguna de estas operaciones fue necesario sacar a la anciana de la residencia en la que estaba ingresada.
Cuando la familia de la anciana se percató de lo que estaba sucediendo lo puso en conocimiento de la Guardia Civil e ingresó a esta mujer en otra residencia para mayores, alejándola definitivamente de estas personas.
La Guardia Civil descubrió que esta misma persona había denunciado, meses atrás, un robo con violencia e intimidación que había sufrido en el domicilio donde vivía, donde supuestamente le sustrajeron 26.000 euros, joyas pertenecientes a la anciana y otros objetos, hecho que resultó ser falso.
En el marco de las investigaciones, la Guardia Civil averiguó que un cuadro con billetes y monedas, denunciado como robado, había sido vendido por él mismo en un establecimiento. También averiguó que una parte de las joyas denunciadas como sustraídas habían sido vendidas por la cuidadora en un comercio de la provincia de Toledo y que, para no levantar sospechas, lo había hecho en pequeños lotes, que vendió en seis ocasiones distintas. Estas personas obtuvieron, con estas acciones delictivas, una cantidad próxima a 56.000 euros.
Cuando los cuidadores se percataron de que ya no les era posible conseguir más dinero dejaron de atender las necesidades del hombre, lo que generó el estado de abandono en el que fue encontrado por los agentes y fue la posible causa que le indujo a simular también un secuestro inexistente.
La Guardia Civil ha instruido las correspondientes diligencias contra A.G.C., B.G.R. y R.R.A. por los delitos, blanqueo de capitales, falsificación de documento público y hurto. A.G.C. también ha sido investigado por dos delitos de denuncia falsa. Todos ellos fueron puestos a disposición del Juzgado de Instrucción número 4 de Torrijos.