Era la una de la tarde cuando varios conductores que circulaban por la talaverana avenida de Francisco Aguirre veían cómo un ave de grandes dimensiones sobrevolaba los vehículos que por allí circulaban.
La ubicación concreta del hecho era la zona de esta avenida entre la rotonda más cercana a la carretera de San Román y la siguiente que conecta con la calle Justiniano López Brea.
Los conductores, alarmados, estacionaron rápidamente sus vehículos para comprobar de qué ave se trataba que casi rozaba los techos de sus coches y al reconocer que era un buitre llamaron a la Policía Local que se personó en el lugar dando aviso a efectivos del SEPRONA, los cuales se hicieron cargo de la situación.
El animal, imaginamos que enormemente desorientado, se posó en un cerramiento de hormigón que delimita el perímetro de varios solares de esa zona y descansó buscando algún punto por el que guiarse para poder volver a su hábitat natural, pero –como mínimo– dejó el susto en el cuerpo a varios talaveranos que fueron testigos del hecho, como se aprecia en la fotografía inferior.
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