Durante los años del régimen franquista, uno de los ministros del gobierno tenía como trabajo fundamental, convencer a los ciudadanos de los logros de la administración.
Durante los años del régimen franquista, uno de los ministros del gobierno tenía como trabajo fundamental, convencer a los ciudadanos de los logros de la administración. En un pueblo de la Andalucía profunda de aquellos años, el ministro daba un mitin sobre las mejoras alcanzadas en los últimos años. “…y hoy en España todo español come un pollo al mes” En ese momento uno de los asistentes levantó la mano y dijo: “Zeño ministro,con tooos miz rezpeto. Por ái hay un hijoputa – en aquellos años el virus tóxico de lo políticamente correcto no había sido inoculado a la sociedad y se hablaba claro y diáfano – que ze está comiendo dos pollos, el de él y el mío; porque yo ni he comio, ni he visto un pollo hace años”.
La renta per cápita es la media del salario anual de los ciudadanos de un país. Leo en Invertia que la renta per cápita de los españoles ha subido y se sitúa en 26.000 euros al año más o menos. Yo he de decir que por ahí hay algún cabronazo que se está metiendo su renta y la mía. Como yo millones de españoles no llegan a los 26.000 euros ni de coña. Claro que para hallarla se meten en el mismo saco la renta del presidente de una comunidad, del presidente de un banco, del consejero de varias empresas, del deportista de élite, del consejero de una comunidad, del concejal de un ayuntamiento, del presidente del gobierno, del barrendero de las calles, de la mujer de la limpieza, de la cajera del supermercado etc. Una vez sumados todos los ingresos se dividen por el número de habitantes y salen los 26.000 euros que ganamos todos, pero que la mayoría de los ciudadanos ni los vemos.
Se dice que hay tres cosas en cuanto a la comunicación entre entidades y personas: “verdades, mentiras y estadísticas” Esto de la renta per cápita es una estadística, es decir, algo peor que una mentira. Aquí en España hay muchísimos que cobran de salario anual 12.000 euros y hay unos pocos que se meten en crudo los otros 14.000 euros restantes hasta los 26.000 euros de miles de españoles. Un político pude cobrar como mínimo tanto como cuatro mileuristas, un banquero puede cobrar tanto como 1.500 mileuristas. Definitivamente hay por ahí alguien – no puedo decir hijoputa porque estamos en la doctrina de lo políticamente correcto – que se está comiendo mi pollo y el suyo.